#1 Tal como va hilando información, las consecuencias a las que nos lleva el artículo son, como poco, para que te entre canguelo.
Hay un pequeño detalle que la autora del artículo pasa por alto (supongo que porque ella lo ve desde "dentro"), y tiene que ver mucho con lo que anotas: la deriva populista en EE.UU. puede acabar de dar el empujoncito al resto de populismos en su órbita de influencia. Si en Europa ya estamos con el agua al cuello (véase Francia, Austria, Polonia...), que desde Estados Unidos nos llegue esta imagen no hace más que darles más munición, por aquellas cosas de la influencia cultural y política.
Gane quien gane en EE.UU. el daño ya está hecho. Nos esperan unos años calentitos.
#2 Es lo que me temo, es que veo cómo va el mundo durante los últimos 15 años y no puedo evitar en hacer paralelismos con los años previos a la 2ª Guerra Mundial, salvando las distancias. Y Estados Unidos influye mucho en el resto del mundo, para lo bueno y para lo malo. De los candidatos a la presidencia, Trump es horroroso, Clinton no me gusta nada, pero me pregunto si esta podría ser tan mala o peor que George W. Bush.
#3 No hay que irse muy lejos para entender el momento actual. Hay dos puntos de inflexión histórica a considerar a la hora de analizar lo que está pasando:
1) 1989-1991. La caída del muro de Berlín y, posteriormente, el bloque soviético. (Yo siempre digo "Gorbachov anunciando un McDonald's con su hija en la Plaza Roja").
2) 2000-2001. El cambio de paradigma en la construcción del modelo europeo (abandono de las tesis socialdemócratas), y su reflejo en el sistema monetario único.
Esos dos momentos y sus consecuencias (globalización liberal y, llamémoslo así, "neo-colonialismo mercantil") son más importantes que buscar comparaciones. Casi todos los eventos importantes que nos han afectado son, de una manera u otra, fruto de aquello.
Que existen semejanzas con la historia hace un siglo es innegable, pero, si te sirve de consuelo, esa no es la única referencia. Se trata de una reacción habitual en todas las sociedades en crisis, cojas el marco cronológico y geográfico que cojas. Pero si las cosas empiezan a coincidir (esperemos que no) demasiado, no será porque se repitan los mismos ingredientes, sino porque no se han previsto las mismas consecuencias.
(creo que no me ha salido una explicación clara, lo siento )
Hay un pequeño detalle que la autora del artículo pasa por alto (supongo que porque ella lo ve desde "dentro"), y tiene que ver mucho con lo que anotas: la deriva populista en EE.UU. puede acabar de dar el empujoncito al resto de populismos en su órbita de influencia. Si en Europa ya estamos con el agua al cuello (véase Francia, Austria, Polonia...), que desde Estados Unidos nos llegue esta imagen no hace más que darles más munición, por aquellas cosas de la influencia cultural y política.
Gane quien gane en EE.UU. el daño ya está hecho. Nos esperan unos años calentitos.
1) 1989-1991. La caída del muro de Berlín y, posteriormente, el bloque soviético. (Yo siempre digo "Gorbachov anunciando un McDonald's con su hija en la Plaza Roja").
2) 2000-2001. El cambio de paradigma en la construcción del modelo europeo (abandono de las tesis socialdemócratas), y su reflejo en el sistema monetario único.
Esos dos momentos y sus consecuencias (globalización liberal y, llamémoslo así, "neo-colonialismo mercantil") son más importantes que buscar comparaciones. Casi todos los eventos importantes que nos han afectado son, de una manera u otra, fruto de aquello.
Que existen semejanzas con la historia hace un siglo es innegable, pero, si te sirve de consuelo, esa no es la única referencia. Se trata de una reacción habitual en todas las sociedades en crisis, cojas el marco cronológico y geográfico que cojas. Pero si las cosas empiezan a coincidir (esperemos que no) demasiado, no será porque se repitan los mismos ingredientes, sino porque no se han previsto las mismas consecuencias.
(creo que no me ha salido una explicación clara, lo siento