Una joven argentina destaca un aspecto de la vida en España: "No quiero normalizarlo"
La joven se ha grabado mientras mientras caminaba por una de las calles por la noche.
La joven se ha grabado mientras mientras caminaba por una de las calles por la noche.
Según defendió Iñigo Errejón, estas palabras resultaban más poderosas para la movilización social que la vieja apelación a la “clase obrera”. Por aquel entonces surgió una inquietud dentro de la izquierda marxista acerca de la vaguedad ideológica de este proyecto político incipiente, pero nadie hizo mucho caso a aquellos comentarios “corta-rollos”.
Finalmente, Oramas ha censurado que desde parte de Podemos se le acusara de formar parte de la "derecha antifeminista" por apoyar la reforma del PSOE. "Esta diputada no es derecha feminista. No tienen vergüenza y han hecho daño a las mujeres y a los niños. Corrijan y pidan perdón", ha concluido.
La vez q llegué a casa y le dije a mi ex que un hombre me había seguido por la calle diciéndome cosas y q estaba harta de q se repitieran ese tipo de situaciones a diario, me dijo que tenía que relativizar. Me decía q ya no me tocaban más calorías, q podía comer hojas de lechuga si seguía con hambre, o si tomando algo con sus amigos, me quitaba de la mano el plato de frutos secos. Casi un año después de esa ruptura, cuando estaba más convencida que nunca de que no volvería a sentirme así por nadie, empecé a salir con mi pareja actual.
Sociológicamente, el lanzamiento, hace ahora 40 años, de Girls just wanna have fun, fue clave. Cindy Lauper cambió la letra original -que trataba sobre un hombre mujeriego- para cantar sobre el derecho de las mujeres a pasarlo bien.
Antes de la Revolución Islámica de 1979, Irán era un país muy distinto del que vemos hoy en día. Era secular, occidentalizado y permitía una buena cantidad de libertad cultural. Puede resultarnos chocante, pero las mujeres de esa época también se vestían de forma moderna en lo referido a la moda. Se ponían ropa similar a la de Occidente e incluso enseñaban buena parte de piel. Hoy en día, el código de vestimenta para las mujeres en Irán es mucho más conservador que en los años 70: ahora deben cubrir su pelo, su cuello y sus brazos. Aunque de
Los chavales pueden identificar esas posiciones antifeministas como transgresoras porque muchas veces, como explica Herrero, el feminismo que perciben en los medios o las redes es uno que a menudo se expresa como verdades morales indiscutibles y que puede ser también extremadamente culpabilizador.
Emilio se asusta al saber que su cita es clásica: “Yo no quiero a una mujer machista en mi vida”. Alexa ha llegado a ‘First Dates’ convencida de que su belleza excita demasiado a los hombres y se sienten chiquititos a su lado, pero también es consciente de que en España los hombres no son tan machistas como a ella le gustaría “me gusta que me consientan, no ser el hombre de la relación”