#15 No creo que haya soluciones fáciles como para arreglarlo todo en un post o en un titular. Hace milenios que se busca y no se consigue. No podemos hacer juez a cualquier ciudadano, como hacían los griegos. Pero no podemos hacer que la legitimidad de la impartición de justicia emane de un rey y que su gobierno esté en manos de un comité elegido por legisladores o por miembros funcionarios de la misma carrera judicial, que actuaría como una casta vitalicia de sacerdotes de la ley.
García Trevijano concluyó que la esencia del poder judicial es la conciencia independiente de un juez, sólo garantizable con una Administración formada por los agentes judiciales. Es decir, la casta de sacerdotes vitalicios y la presunción de conciencia independiente de un hombre. Un estado paralelo.
Querría saber cómo resolvieron esto los fundados de los EEUU, que se enfrentaron al problema al crear un estado de nueva planta intentando no repetir demasiados esquemas. Me consta que en EEUU hay jueces vitalicios nombrados por el jefe del estado lo que ya es en sí mismo un mal arreglo.
García Trevijano concluyó que la esencia del poder judicial es la conciencia independiente de un juez, sólo garantizable con una Administración formada por los agentes judiciales. Es decir, la casta de sacerdotes vitalicios y la presunción de conciencia independiente de un hombre. Un estado paralelo.
Querría saber cómo resolvieron esto los fundados de los EEUU, que se enfrentaron al problema al crear un estado de nueva planta intentando no repetir demasiados esquemas. Me consta que en EEUU hay jueces vitalicios nombrados por el jefe del estado lo que ya es en sí mismo un mal arreglo.
Lo mismo debería hacerse con el legislativo y el judicial.
Al legislativo y al ejecutivo se les podría elegir por sufragio y en elecciones separadas. Algo mejoraría.