Pan blanco, embutidos (industriales), dulces y bebidas alcohólicas tienen todos una cosa en común: carbohidratos de absorción rápida e insulina a tope. No es que te hagan envejecer, eso es muy orientativo y no sé si estará soportado por algún metaestudio pero la clave es el engorde y los riesgos cardiovasculares directos e indirectos.

Por cierto, supongo que de aquí a un lustro o así se redescubrirán los beneficios de la sal y el tomarla a placer, sin salvajadas, claro.