Pues la enésima senal de que la dirección de Podemos e Iglesias (valga la redundancia) se han podrido de ego y victimismo hasta el tuétano. Y podemos tirarnos horas justificandolo porque material hay, porque toda la basura y la cloaca, lawfare o como se quiera llamar, contra la izquierda alternativa al PSOE ha sido muy real y no se olvirará en la vida, pero la realidad es esta: ese partido que iba a ser un instrumento de cambio y consenso es una máquina de expulsar "disidentes" al dogma absoluto de un grupo que ha demostrado ser, como gestores políticos, cuanto menos mejorables y que va a acabar por "Upydeizar" el partido.

Soy seguidor de Gregori, hasta la fecha me ha parecido un periodista como la copa de un pino.