El Mundo Está Loco, Loco, Loco (1963)
Un grupo de automovilistas presencia un grave accidente que provoca la muerte del conductor de un coche. En el momento de ir a socorrerle, el herido fallece no sin antes confesarles un pecuniario secreto: un cuantioso botín se halla escondido en un parque público de Santa Rosita debajo de una gran uve doble. Poco después se entablará una frenética carrera entre ellos para lograr la consecución del dinero.