Para los que como yo no confiais en la gente,

Al capullo que me envenenó al perro lo tengo localizado. Trabaja de guardia de seguridad en unos pisos para que no se les metan ocupas.

Pues bien, he conseguido tocar al responsable para que lo echen a la puta calle e incluso me he ofrecido a pagar la indemnización, que tampoco es que fuera mucho. La respuesta ha sido que entre su política no está jugar con el pan de sus empleados y que si después de todo, el cliente no quiere que este chico preste servicios alli que lo mueve a otro sitio y lo sustituye por otra persona diferente, porque tampoco va a ir contra su cliente, pero despedirlo no lo despide.

No sé si echarme a llorar o alegrarme de que aún quede gente integra.