Alarma mundial

Alerta por el impacto de una "grave" tormenta solar que golpeará esta noche la Tierra

El fenómeno permitirá ver auroras boreales a latitudes mucho más bajas de lo normal

Tormentas solares
Tormentas solares.La RazónLa Razón

El Centro de Predicción del Clima Espacial de Estados Unidos (SWPC) de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), ha emitido un comunicado en el que alerta de que una "gran" tormenta geomagnética impactará en la Tierra este lunes por la noche. La predicción apunta a que dichas tormentas podrían alcanzar una fuerza G4 "grave" en una escala de G1 a G5.

Según informó el Centro de Predicción del Clima Espacial, el pasado sábado, 23 de marzo, se produjo una eyección de masa coronal (CME, por sus siglas en inglés) que comenzó a impactar contra el campo magnético de la Tierra tan solo 24 horas después. Sin embargo, este fenómeno se ha intensificado durante las últimas horas y ha provocado que el organismo emita una alerta mundial debido a la gravedad de la situación.

Una eyección de masa coronal (CME) es una explosión de plasma y material magnético solar que puede llegar a la Tierra en tan solo 15 o 18 horas, según explica la NOAA. Además, según la NASA, las CME pueden crear corrientes en los campos magnéticos de la Tierra que envían partículas a los polos norte y sur.

Además, la escala de tormentas geomagnéticas oscila entre G1 y G5. En el punto más bajo se encuentra G1, que se atribuye a tormentas menores, mientras que en el más alto se encuentra G5, denominada como "extrema".

Efectos en la Tierra

Una de las principales consecuencias de las tormentas solares es la posibilidad de avistar auroras boreales a latitudes mucho más bajas de lo normal. De hecho, se pronostica que se puedan ver auroras boreales en Estados Unidos y en Reino Unido hoy por la noche.

Además, otro de los efectos que puede ocasionar la tormenta solar es que, debido a la carga magnética, se produzcan perturbaciones en las redes de comunicaciones y en los sistemas de comunicación de las aeronaves. De hecho, la NOAA prevé que esto ocurra, aunque considera que ninguna de estas alteraciones será lo "suficientemente grave" como para poner en peligro infraestructuras críticas.