Detenidas cinco personas por intentar ocupar tres viviendas en Palma y causar daños

La Policía Nacional en Palma ha detenido a tres hombres de origen español, uno de origen colombiano y uno de origen ecuatoriano, de 18, 25, 26, 29, 33 años de edad, como presuntos autores de un delito de ocupación y daños, en tres intervenciones diferentes.

Según ha informado la Policía el pasado viernes 9 de febrero, sobre las 11:45 horas, una patrulla fue comisionada a una vivienda de la barriada de Camp Redó (Palma) donde se estaba inutilizando el sistema de alarmas.

Una vez en el lugar, el técnico de seguridad explicó a los agentes que el día anterior, por la tarde, habían instalado un sistema de alarma y que momentos más tarde habían recibido el aviso alertando de que el mismo había sito inutilizado. Así, descubrieron que alguien había intentado acceder a la vivienda por una ventana, así como que el sistema de alarma había sido dañado, sin encontrar a nadie en el interior.

Por tales motivos, en el momento de los hechos, el técnico se había personado en la vivienda para realizar la reparación y sustitución del sistema de seguridad, descubriendo que la puerta instalada había sido arrancada del marco y sustituida por otra puerta, por lo que alertó a la policía.

Los agentes procedieron a llamar a la puerta, solicitando que quien estuviera en la vivienda acreditara ser el propietario o inquilino de la misma, visualizando los policías que en el interior del inmueble no había mobiliario alguno.

Así, un hombre procedió a cerrar la puerta rápidamente impactando la misma contra un agente, al tiempo que se resistía de forma violenta a ser detenido. Los policías encontraron entre sus pertenencias un juego de llaves de la cerradura de la nueva puerta instalada.

En ese momento, numerosos familiares del detenido acudieron al lugar y una mujer comenzó a arremeter contra los agentes agarrándolos de los brazos, empujándoles y dándoles golpes, por lo que se procedió también a su detención.

Posteriormente, el mismo día, a las 13.30 horas, los agentes fueron comisionados a un domicilio de la barriada de son Malferit, donde se estaba inutilizando un sistema de alarma.

Una vez en el lugar, los agentes, que tenían conocimiento de que en el día anterior a los hechos se había producido un lanzamiento judicial en dicha vivienda, habiéndose desalojando el domicilio, dejando las ventanas sin cortinas, advirtieron una ventana tapada, por lo que dedujeron que alguien había entrado en la misma.

En el lugar se encontraba el vigilante de seguridad, quien no pudo acceder a la vivienda, ya que se habían cambiado los bombines.

Los agentes procedieron a tocar a la puerta, abriendo la misma un hombre, que manifestó que llevaba una semana morando en el domicilio, lo que era falso, ya que en el día anterior, tras el lanzamiento, se instaló un sistema de alarma y se cambió la cerradura de la puerta.

Tras presentar su documentación, los agentes pudieron comprobar que era el mismo varón que en el día anterior había sido desalojado del domicilio, encontrándose también en el interior del mismo una mujer, quien también había sido desalojada anteriormente.

Los policías procedieron a la detención de ambos, entregando los mismos las llaves del nuevo bombín de la puerta.

Finalmente, los agentes fueron comisionados a una vivienda de Pere Garau, donde había un varón en el interior, destrozando los sistemas de alarma existentes.

Una vez en el lugar, los agentes se encontraron al vigilante de seguridad que estaba allí y que tenía las llaves de la vivienda. Al subir a la misma se encontraron la puerta abierta y forzada observando que el marco había sido fracturado y que en el interior de la vivienda el sistema de alarma había sido arrancado y dañado.

Asimismo, en una de las habitaciones se encontraba un hombre que manifestó que su intención era ocupar la misma, por lo que los agentes procedieron a la detención del varón.