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El PP rechaza el plan de Vox para ilegalizar partidos independentistas que planteó Feijóo en enero

Plano general del hemiciclo del Congreso

Carmen Moraga

Madrid —

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Vox ha vuelto a quedarse sin apoyos en el Congreso en su pretensión de ilegalizar a los partidos “separatistas” y nacionalistas –Junts, ERC y EH Bildu– y para recuperar el delito de sedición, entre otras medidas. El PP, que ya le dio la espalda en el Senado a finales de noviembre del año pasado ante una propuesta muy similar, ha dejado de nuevo dicho que no cuenten con ellos para tal cosa pese a reconocer que coinciden con el partido de Abascal en algunos de sus argumentos.

De hecho, el propio PP de Alberto Núñez Feijóo también planteó en enero ilegalizar fuerzas independentistas. En su enmienda a la totalidad a la ley de amnistía, los populares propusieron “la disolución de las organizaciones o personas jurídicas que promuevan consultas o referéndums de autodeterminación”, aunque luego se echaron para atrás.

Pero este martes, el portavoz del PP, Manuel Cobo, les decía lo siguiente a los diputados de Vox: “Votaremos en contra de su proposición”. “Así podrán decir luego que solo Vox hace oposición y defiende la Constitución”, ironizaba. El diputado del PP ha llegado a recordar a sus aliados en diversas autonomías que “ilegalizar a partidos políticos va en contra de la Constitución”, pese a que también ellos llegaron a planteárselo.

La proposición de ley del partido de Abascal, englobada en un genérico titular encaminado a “garantizar la unidad de España”, ha sido defendida en la tribuna por el diputado valenciano Carlos Flores Juberías, y llega justo después del triunfo del PP el pasado domingo en Galicia, en donde Vox ha fracasado, y cuando la Mesa del Congreso ha dado una prórroga al PSOE para seguir negociando la ley de amnistía con Junts, grupo que ha preferido no intervenir en el debate de este martes.

Flores Juberías, en su intervención, ha acusado al PSOE de “entregar el Gobierno de España a quienes pretenden su destrucción” y de “dividir en dos a la sociedad” con sus leyes y concesiones a estos grupos “separatistas”. “Nuestro país avanza sin frenos hasta el descarrilamiento”, ha sentenciado el diputado de extrema derecha, que ha recordado que “eso de que España no se rompe” ha sido puesto en cuestión “por entidades cívicas”, “intelectuales”, algunos “filósofos” y hasta por más de “un dirigente exsocialista”.

La propuesta de la extrema derecha, además de exigir ilegalizar a partidos independentistas como ERC, Junts y Bildu, pide castigar el uso de símbolos separatistas, prohibir los referendos con fines contrarios a la unidad del país, recuperar el delito de sedición y aumentar el castigo por contactos con potencias extranjeras para dañar a España.

El argumento del partido de Abascal es que estas tres formaciones aliadas de Sánchez representan “un” problema y “un peligro” “especialmente graves” para nuestro país, ya que son minorías parlamentarias capaces de “condicionar” la formación de gobiernos y políticas de Estado, así como leyes tan importantes como los Presupuestos. Una influencia, que consideran “absolutamente desproporcionada” en la política española. Por ello piden modificar la Ley de Partidos Políticos con el fin de romper con esa dinámica introduciendo una cláusula de garantía para que las marcas sucesoras de estos partidos no puedan presentar candidaturas ni continuar la actividad de los ilegalizados.

Vox, además, sostiene que hay que “garantizar y proteger” la soberanía y la integridad de España ante los “ataques” del Gobierno y los partidos separatistas, los cuales “constituyen una amenaza de primera magnitud” por lo que también quieren que se modifique el Código Penal “para castigar las ofensas o ultrajes a los símbolos de España” y “la exhibición pública de emblemas que atenten contra la integridad del territorio nacional”.

La propuesta de Vox reclama igualmente “la ilegalización de todo aquel referéndum o consulta cuyo fin sea legitimar la destrucción de España” y advierte de que “toda aquella autoridad o funcionario, que careciendo de competencias, convoque o autorice la convocatoria de este tipo será castigado con la pena de prisión de tres a cinco años e inhabilitación absoluta por un tiempo de entre tres y ocho años”.

En otro punto se recupera el delito de sedición que se aplicó a los líderes del procés y que fue suprimido por el PSOE tras un pacto con ERC la pasada legislatura, con penas de prisión de doce a quince años para aquellas personas constituidas en autoridad.

Los partido afectados critican la propuesta

En su turno, la diputada de EH-Bildu, Marije Fullaondo, ha criticado duramente al partido de Abascal por traer esa propuesta que para su grupo es “retroceder en los derechos y libertades”. “No es nada nuevo”. “No les gusta la democracia, les sobra la democracia y lo dejan claro todos los días”, ha señalado, para acusar después a Vox de “totalitarismo”, y de representar “ideas reaccionarias”.

“Nunca podrán hacer desaparecer al independentismo porque las ideas no se pueden encarcelar ”, ha sentenciado la diputada de EH-Bildu, mientras recordaba que Vox “son la nada en Euskal Herria”.

El representante de ERC, Francesc- Marc Álvaro Vidal, se ha sumado a las críticas y ha reprochado al partido de Abascal que pretendan ilegalizar “a todos los que no piensan” como ellos. “Las recetas de Vox son antiguas y pasadas de moda”, ha dicho, pero “siempre han fracasado”, ha recordado. Álvaro Vidal ha acusado al partido de extrema derecha de ejercer “la política de resentimiento” y de “no aceptan la diversidad del Estado español”. “Con esta proposición se han retratado, pero afortunadamente no se va a aprobar”, ha vaticinado.

También el diputado del PSOE, Alejandro Soler, ha critica al partido de Abascal ya que cree que con esta iniciativa “hacen una interpretación interesada de la Constitución española” que propugna, entre otras cosas, “la igualdad” y “la pluralidad de partidos” y que se fundamenta en la unidad de la Nación, además de garantizar la existencia de las autonomías: “Un fastidio para ustedes que pretenden una España monolítica en la que todos piensen igual”, les ha espetado. “Hablan de España pero se olvidan de los españoles”, “se creen que defender España en llevar una banderita en la solapa”, ha añadido Soler.

El diputado socialista ha aprovechado además para meterse con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, por su cambio de opinión frente a los indultos a Puigdemont y la ley de amnistía: “Ustedes ahora no ven delitos de terrorismo” mientras antes sí . “Ustedes viven en la mentira permanente. Dejen de generar alarmismo”, le ha pedido Soler.

Aina Vidal, de Sumar, ha considerado que la propuesta de Vox “representa el viejo mundo”. “Son ustedes un partido de derechas, de la derecha nostálgica, un partido absolutista” y “retrógrado” y que “da lecciones de democracia y de Constitución pero luego la pisotean” y “promueven una nueva cruzada que pasa por ilegalizar a partidos políticos”, ha sentenciado.

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