El Ministerio Fiscal solicita solamente 4 años de prisión para Christian Camilo Monsalve Granja, de 27 años, acusado de haber causado la muerte del portero de una discoteca de Villava, Carlos Amorín Lamas, de 42 años, el pasado mes de noviembre. El Ministerio Público califica los hechos como constitutivos de un delito de lesiones en concurso con un homicidio imprudente y plantea que la condena sea sustituida por la expulsión de España del procesado, que es natural de Colombia.

El Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona ha concluido en menos de dos meses la tramitación de la causa por los hechos ocurridos el 26 de noviembre de 2023, en el exterior de la discoteca Tótem-Dalí de Villava, en el polígono industrial de Landazabal. La causa, en la que está personada la hermana como acusación particular, se enjuiciará próximamente en un Juzgado de lo Penal. 

En su escrito de calificación provisional, la Fiscalía indica que sobre las 4.50 horas el acusado, que fue detenido poco después de los hechos por la Policía Foral y desde entonces está en prisión provisional, se encontraba en la discoteca Tótem y en los exteriores se acercó hasta donde dos varones se estaban agrediendo mutuamente, “intervino en la pelea y comenzó a golpear a uno de ellos”. Por este motivo, dos miembros del servicio de seguridad de la discoteca, entre los que estaba Carlos Amorín, se acercaron al lugar de la pelea, y seguidamente lo hizo un tercer miembro de seguridad del local. 

Tras calmarse momentáneamente el conflicto, se reinició la pelea y la víctima “se volvió a acercar a la reyerta”. En ese momento, prosigue la Fiscalía, el acusado, "con ánimo de atentar contra su integridad física, lanzó un puñetazo a la cara a Carlos Amorín, que le hizo tambalearse y perder un poco el equilibrio y, a continuación, cogió carrerilla y le impactó un fuerte puñetazo con su mano izquierda en la cara, que le hizo perder totalmente el equilibrio y caer con la cabeza hacia atrás, golpeándose contra el suelo, donde quedó tumbado con las piernas rígidas e inconsciente, sangrando de la boca y la nariz”. 

El acusado, apunta la Fiscalía, presentaba una tasa de alcohol de 0,61 miligramos de alcohol por litro de aire espirado en una prueba que le fue realizadas a las 7.14 horas del día de los hechos.

El hombre fue trasladado en una ambulancia al Hospital Universitario de Navarra (HUN) e ingresó en situación de coma con múltiples lesiones craneales y cerebrales, algunas de las cuales le fueron causadas por el traumatismo directo en la zona (los puñetazos del acusado) y otros fueron producto de la caída y posterior traumatismo en el suelo, especifica el Ministerio Público. El 29 de noviembre, a las 21.34 horas, falleció en el centro hospitalario.

Para el Ministerio Fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de lesiones en concurso ideal con un delito de homicidio imprudente, y pide que sea condenado a 4 años de prisión, pena que plantea que sea sustituida por la expulsión y la prohibición de regresar a España durante diez años. En cuanto a la responsabilidad civil, pide que el acusado indemnice a la madre de Carlos Amorín con 40.000 euros, a su hijo de 5 años con 60.000 euros y a su hermana con 8.000 euros.