BUENOS AIRES.- En la tarde del miércoles, el Directorio del Banco Central (BCRA), liderado por Santiago Bausili, se reunió para abordar medidas relacionadas con la emisión de deuda dirigida específicamente a empresas importadoras con compromisos pendientes de pago por bienes y servicios. De esta manera, se dio a conocer la estatización de la deuda privada externa de hasta U$S 30.000 millones por parte del gobierno de Javier Milei.
La Comunicación “A” 7918 anunció la creación de los Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (BOPREAL), destinados exclusivamente a importadores con deudas pendientes por importaciones. El plazo máximo para saldar estas obligaciones se estableció hasta el 31 de octubre de 2027. El BCRA especificó que la moneda de suscripción será en pesos, según el tipo de cambio de referencia publicado por el BCRA en función de la Comunicación «A» 3500 del día hábil previo a la fecha de licitación.
Santiago Bausili encabeza medida controversial de Javier Milei para el BCRA
Los pagos, en dólares estadounidenses, incluirán una tasa de interés anual del 5%. Esta medida se presenta como una solución ante el crecimiento sustancial de la deuda de importadores con proveedores extranjeros, que pasó de un promedio de 30 mil millones de dólares en años anteriores a casi 58 mil millones de dólares en 2023, consecuencia de la escasez de divisas generada por condiciones climáticas adversas.
Sin embargo, la propuesta ha generado controversia debido a la magnitud de la emisión, cercana a los 30 mil millones de dólares, y a la considerable proporción de deuda intrafirma, es decir, deudas contraídas con empresas del mismo grupo. Carlos Rodríguez, exasesor económico de Javier Milei, expresó en redes sociales sus dudas sobre la legitimidad de parte de esta deuda, sugiriendo la posibilidad de que algunas deudas se hayan contraído con falsas empresas exportadoras creadas por el mismo importador en el extranjero.
Además, planteó interrogantes sobre la necesidad de que el BCRA refinancie deudas del sector privado, argumentando que quienes prestaron y entregaron la mercadería conocían los riesgos asociados. Esta medida, aunque busca abordar los desafíos económicos actuales, plantea preguntas legítimas sobre la transparencia en la gestión de deudas y el papel del BCRA en la refinanciación de obligaciones del sector privado.
El afán endeudador del nuevo equipo económico no tuvo mejor idea que convertir la deuda externa privada (de importadores con sus proveedores, muchas veces el mismo grupo empresario) en una deuda en bonos. Lo mejor: los importadores entregan pesos y se llevan titulos dollar linked pic.twitter.com/vvWgp1eJXE
— Esteban Mercatante (@EMercatante) December 13, 2023
