Alemania impone controles fronterizos con Polonia y República Checa para detener la inmigración ilegal

La decisión del gobierno alemán de imponer controles temporales en las fronteras de Alemania con Polonia y la República Checa en un intento de frenar la afluencia de solicitantes de asilo promete elevar las tensiones de Berlín con el gobierno ultraconservador polaco. El ejecutivo alemán del socialdemócrata Olaf Scholz acusó duramente esta semana a Varsovia de enviar de forma ilegal hacia Alemania a más de 250.000 migrantes mediante un sistema de sobornos con las visas, que según el canciller sería una de las causas del aumento de la llegada de migrantes.

En Alemania han saltado las alarmas ante el imparable aumento de las peticiones de asilo en lo que va de año, un 77% más que en 2022, con un total de 204.000 solicitudes en los ocho primeros meses de 2023. Los estados federados afectados por este flujo creciente de personas en busca de ayuda aseguran estar desbordados y han pedido al canciller Scholz que intervenga con medidas de control adicionales en las fronteras.

Y eso es lo que ha hecho Scholz con el establecimiento de controles fronterizos en un anuncio realizado por la ministra del Interior, Nancy Faeser, quien ha dicho que los "controles temporales en cruces fronterizos seleccionados" comenzarán "en los próximos días". La ministra añadió que los cambios se harán en colaboración con los gobiernos de Varsovia y Praga y que no es necesario el consentimiento de la Comisión Europea. A su juicio, las fronteras exteriores de la Unión Europea necesitan un mejor control ya que de lo contrario las normas de Schengen estarán en riesgo.

El rifirrafe entre Alemania y Polonia por el asunto migratorio ha ido en aumento en las últimas semanas. Varsovia está planeando dar un paso más allá y amenazar con el cierre de la frontera con Alemania para impedir, dice, que los migrantes que están en Alemania intenten entrar a Polonia, según informa Politico, que menciona las amenazas que se han lanzado desde Polonia contra las acusaciones de Scholz en las que éste denunció un escándalo de tráfico de visas en territorio polaco.

En este sentido, el ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Zbigniew Rau, ha pedido al canciller alemán que "se abstenga de hacer declaraciones que dañen nuestras relaciones mutuas". El gobierno polaco del PiS -en el poder desde 2015- ha inflamado la retórica nacionalista y anti alemana en los últimos tiempos y algunos de sus dirigentes han exigido incluso reparaciones por los crímenes de la Alemania nazi.

Lo que dice Bruselas

La Comisión Europea se ha pronunciado este miércoles avalando la decisión de Berlín de introducir controles fronterizos: "Estamos al corriente de que Alemania tiene intención de tomar medidas para impulsar los controles policiales. Estamos en estrecho contacto con las autoridades de ese país", indicó la portavoz comunitaria de Interior, Anitta Hipper, quien precisó que esa medida se está llevando a cabo además "en coordinación" con las autoridades de Polonia y Chequia.

La misma portavoz recordó que los controles policiales se deben diferenciar de los controles en las fronteras interiores y deben satisfacer una serie de condiciones: no tener los controles fronterizos como objetivo, necesitan estar basados en informaciones sobre amenazas a la seguridad pública y su objetivo debe ser combatir la delincuencia transfronteriza. En ese contexto, insistió en que es "una medida alternativa" que Bruselas considera "útil" y que la Comisión promueve como alternativa a los cierres en las fronteras interiores.

En 2022 se registraron unas 2.666.000 entradas a través de las fronteras alemanas y entre enero y agosto de este año la Oficina Federal de Migración y Refugiados ha computado 220.116 peticiones de asilo, lo que supone a un aumento del 77,2% en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Salvini carga contra Alemania

En Italia, la Liga, liderada por Matteo Salvini y que forma parte de la coalición de Gobierno italiana, ha criticado también a Alemania por su postura con respecto a las ayudas para las ONG humanitarias que trabajan en el Mediterráneo aprobadas por el Bundestag. El vicesecretario de la Liga, Andrea Crippa, ha afirmado este martes que la parte alemana busca "desestabilizar" al Gobierno italiano utilizando la migración para "reducir el consenso" existente en el bloque de centro derecha.

"Hace 80 años el Gobierno alemán decidió invadir Estados con su Ejército, pero le fue mal. Ahora financian la invasión de inmigrantes ilegales para desestabilizar los gobiernos que no le gustan a los socialdemócratas", ha dicho, ha recogido el diario 'La Repubblica'.

El Ministerio de Exteriores alemán informó el viernes de que aceptaría los fondos aprobados por el Bundestag para un proyecto de rescate marítimo y otro de atención en tierra, cada uno de ellos por un importe entre los 400.000 y los 800.000 euros.

Salvini arremete contra Berlín: "Hace 80 años Alemania invadió Estados con su Ejército. Ahora financian la invasión de inmigrantes ilegales para desestabilizar los gobiernos que no le gustan a los socialdemócratas"