Armamento

EEUU lanza un misil intercontinental Minuteman al Pacífico después de avisar a Rusia

Aunque el lanzamiento estaba programado desde hace tiempo, llega en un momento delicado por las amenazas de Corea y la asertividad china y rusa

Imagen del lanzamiento del misil intercontinental Minuteman lanzado este miércoles desde California
Lanzamiento de un misil de EEUU Minuteman IIIVandenberg Space Force Base/X

Estados Unidos ha lanzado este miércoles un misil balístico intercontinental Minuteman III, equipado con una ojiva simulada, desde una base en California para demostrar la "preparación" de las fuerzas nucleares del país.

El lanzamiento del misil no armado se ha realizado desde la base especial de North Vandergberg, ubicada a unos 250 kilómetros al sur de Los Ángeles, en la costas del Pacífico. El ejército ha rastreado la ojiva del misil mientras viajaba hacia un objetivo predeterminado ubicado en el Océano Pacífico Central.

EEUU había avisado al gobierno ruso sobre sus planes de lanzar el misil siguiendo "sus obligaciones bilaterales existentes", según señaló el portavoz del Pentágono, el general de brigada Pat Ryder en una rueda de prensa. El gobierno estadounidense ya tenía programado este lanzamiento desde "hace años" y se trata de algo "rutinario" con el objetivo de "validar la efectividad" del sistema de armas de EEUU, agregó Ryder.

Actualmente, existen 400 misiles Minuteman III en alerta en diversas bases militares estadounidenses, como las de Almstrom en Great Falls, Montana; Minot, en Dakota del Norte; y Warren, en Wyoming.

Misiles Minuteman 3
Misiles Minuteman 3WikimediaWikimedia

Según del Departamento de Defensa, esta demostración sirve como una evaluación esencial de las capacidades nucleares de Estados Unidos y destaca los esfuerzos en curso para mantener la preparación de sus fuerzas armadas.

El Minuteman es un misil balístico diseñado no para entrar en órbita sino para transportar una carga a grandes distancias. El Pentágono pensaba hasta hace poco que estos proyectiles son clave para la disuasión. “Para destruir misiles balísticos intercontinentales estadounidenses en tierra, un adversario tendría que lanzar un ataque coordinado con precisión con cientos de ojivas precisas y de alto rendimiento. Este es un desafío insuperable para cualquier adversario potencial hoy, con la excepción de Rusia”, decía en un informe de 2018.

El disparo de este misil coincide con las tensiones con el gobierno de Vladimir Putin por la guerra en Ucrania, y el refuerzo en las alianzas con los gobiernos de Japón y Corea del Sur por parte del gobierno de Joe Biden para hacer frente a Core del Norte.

Japón, en alerta

Mientras tanto, el Gobierno de Japón señaló que se encuentra "vigilando con preocupación" los movimientos de Pionyang ante la posibilidad de que los líderes de Corea del Norte, Kim Jong-un, y Rusia, Vladimir Putin, se reúnan próximamente.

Tokio se pronunció así tras las informaciones publicadas por medios estadounidenses que apuntaban a un encuentro planeado entre los líderes de Moscú y Pionyang para, entre otros puntos, sellar un intercambio de armamento y tecnología aeroespacial y militar, lo que podría vulnerar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.

"Estamos vigilando esta situación con preocupación ya que podría suponer un caso de violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, que prohíben totalmente las exportaciones de armamento y materiales relacionados de Corea del Norte", dijo hoy al respecto el portavoz del Ejecutivo nipón, Hirokazu Matsuno, en rueda de prensa.

Japón se encuentra "analizando los movimientos de Corea del Norte, incluidos los militares" y "seguirá cooperando estrechamente con la comunidad internacional con vistas a que el país cumpla las resoluciones de la ONU", añadió Matsuno.

Estados Unidos, por su parte, advirtió en la víspera a Corea del Norte de que "pagará un precio en la comunidad internacional" si suministra armamento a Rusia destinado a la guerra en Ucrania y pidió al país que respete su compromiso público de que no lo hará, a través del asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.

Con información de Efe