El Gobierno tumba la inversión de 1,8 millones de euros para la compra del nuevo velero de competición del Rey Felipe VI

El Gobierno de Pedro Sánchez ha paralizado la inversión pública de 1,8 millones de euros que la Armada tenía prevista y licitada para la compra del nuevo velero de competición del Rey Felipe VI, que debía estrenarse en Palma en el verano de 2024, en el marco de la Copa del Rey de Vela.

Como adelantó Diario de Mallorca el 31 de agosto, la Armada, a través del Ministerio de Defensa, publicó a mediados de mes en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el contrato de licitación del nuevo barco llamado a sustituir al viejo Aifos de la Comisión Naval de Regatas de la Armada,  un TP52 botado en el año 2005 que ya navegó en su día con el nombre de Aifos y el Rey a la caña. Y que incluso se proclamó vencedor de la Copa del Rey en 2008, aunque en aquella ocasión lo hizo patroneado por el almirante Jaime Rodríguez Toubes . 

La Armada gastará 1,8 millones en el nuevo barco de regatas del rey Felipe VI que estrenará el año que viene en Palma

Para el nuevo buque de competición Defensa preveía un periodo de construcción de ocho meses de duración, así como una serie de características ya definidas:  50 pies de eslora, 4,70 metros de manga, calado de tres metros, superficie vélica de 400 metros cuadrados y 8,7 toneladas de desplazamiento, además de motor y todo el equipamiento técnico para la navegación de alta competición.

A raíz de la publicación en este diario de la información, el PNV, a través de su portavoz Aitor Esteban, preguntó al Gobierno en el Congreso este lunes si era verdad que el Estado, a través del Ministerio de Defensa, iba a realizar una inversión pública para costear una actividad privada de Felipe VI. En concreto, las preguntas al Ejecutivo fueron tres: ¿Son propiedad del Estado los barcos que utiliza al Rey en competiciones privadas?; ¿Es cierta la noticia de que la Armada va a gastar 1,8 millones de euros para la construcción y compras de un nuevo barco de regatas para este fin?; ¿Considera el Gobierno que debe emplearse dinero públicos para costear una actividad privada del Jefe del Estado?

La respuesta del Ministerio que dirige Margarita Robles no ha podido ser más clara, tumbar por ahora la inversión, que coincide con la negociaciones que el PSOE está llevando a cabo todas las fuerzas parlamentarias, entre ellas el PNV para la formación del nuevo Gobierno. Podemos, por su parte, también había mostrado su total oposición a la inversión pública.

Así ha sido la segunda jornada de regatas de la Copa del Rey de vela en la bahía de Palma

El segundo intento frustrado de comprar un nuevo velero de regatas para Felipe VI

Se trata del segundo intento frustrado para conseguir un nuevo velero de competición para el Rey Felipe VI. El primer intento por sustituir el Aifos por un nuevo barco de competición moderno y puntero llevó a la Armada en el año 2019 a firmar un acuerdo con los exclusivos astilleros finlandeses Swan. 

El contrato contemplada la cesión de un Swan 50 Club a la Armada durante dos años, con una opción de compra al tercer año y con un coste global de un millón de euros.

Sin embargo, los recortes obligados por la crisis del coronavirus en Defensa y la exigencia de austeridad de la Casa del Rey frustraron los planes iniciales y se optó por devolver el exclusivo velero sin ejercer la opción de compra, después de que Felipe VI pudiera estrenarlo en las ediciones de la Copa del Rey de vela de los años 2019 y 2021 (en 2020 la competición no se celebró por la pandemia).

El flamante Swan que patroneó el Rey en la bahía de Palma y que luego tuvo que devolver fue bautizado como Aifos 500 en conmemoración del quinto centenario de la primera vuelta al mundo. Y fue diseñado por el prestigioso arquitecto naval argentino Juan Kouyoumdjian.

La Armada se vio obligada acometer entonces una nueva reestructuración en el viejo Aifos, un buque de antigüedad considerable para la competición que había pasado de la clase TP52 a la IRC manteniendo sus prestaciones. Con este velero, Felipe VI ha conseguido este año el primer podio de su carrera en la Copa del Rey con un buque de la Armada. Pero en 2020, cuando tuvo que devolver el Swan a los astilleros, vio como el Rey Harald de Noruega adquiría el mismo barco y lo atracaba en la estación naval militar de Portopí, en Palma.