Descubiertos en el Reino Unido cientos de cadáveres de ancianos que vivían solos

juan francisco alonso LONDRES / E. LA VOZ

SOCIEDAD

Muchos fueron hallados hasta 14 días más tarde porque los vecinos se quejaban del mal olor

09 jun 2020 . Actualizado a las 15:46 h.

La soledad ya era un problema de Estado en el Reino Unido. De hecho, la anterior primera ministra, Theresa May, propuso en 2018 crear un ministerio para combatirla. De acuerdo con las cifras oficiales, afecta a 9 millones de personas en el país, sobre todo ancianos, pero la llegada al poder de Boris Johnson hizo que el asunto se olvidara. Sin embargo, la pandemia del covid-19 ha vuelto a colocar el tema sobre el tapete y de manera brutal, pues un estudio publicado ayer por la prensa advierte que el coronavirus acabó con la vida de decenas, sino cientos, de personas que vivían solas en sus casas y en algunos casos las autoridades demoraron hasta dos semanas en hallarlas.

«Tenemos muchos casos de personas que fallecieron durante la pandemia y que no fueron halladas hasta 7 o 14 días después, luego de que familiares, amigos o vecinos dieran la voz de alarma o por el olor que generaban sus cuerpos en descomposición», reveló a la prensa el doctor Mike Osborn, quien presidió el comité del Real Colegio de Patólogos que condujo la investigación.

Aunque el estudio no ofrece una cifra exacta de víctimas, en especial ancianos o personas algún tipo de dolencias previas, que han podido morir en esas condiciones, sí se advierte que entre finales de marzo y mayo solo en Londres se registraron 700 decesos en casas particulares que pueden ser atribuidos al covid-19 o que se sospecha que este fue el causante.

El estudio se conoce justo cuando el coronavirus parece estar dando un respiro al país. Ayer, por segundo día consecutivo, no se registró un solo fallecido en Escocia y en Inglaterra se reportó el número más bajo desde el 22 de marzo, 59 decesos, informaron las autoridades.

Un remedio que mata

Desde el Real Colegio de Médicos de Familia alertaron de que no solo el covid-19 ha matado a personas solitarias, sino también el confinamiento impuesto desde el pasado 23 de marzo, en el que familias y amigos no han podido reunirse si no viven bajo el mismo techo; que ha hecho que muchos enfermos no hayan acudido a los hospitales, pese a requerirlo, por temor a contagiarse o a colapsar los centros de salud.

«El covid-19 ha creado la pandemia de la soledad, pero no solo para gente mayor, sino lamentablemente para otros grupos vulnerables», aseguró el profesor Martin Marshall, miembro de la organización que agrupa a los médicos de cabecera. De los 9 millones de británicos que dicen estar solos, unos 2 millones son ancianos y, de ellos, el 75 % vive por su cuenta. Por su parte, 200.000 admitieron que pasan hasta un mes sin tener una sola conversación con un familiar o amigo, según reveló un estudio elaborado en 2018 por el Gobierno británico. Pero como si lo anterior no fuera suficiente, la investigación oficial también advertía que las víctimas de la soledad fumaban y bebían más, por lo que eran más propensas a sufrir enfermedades relacionadas con esas adicciones.

Los datos del estudio han reavivado el debate sobre la eficacia del confinamiento. Este lunes el Imperial College London publicó un informe en el que afirma que las medidas de aislamiento físico redujeron en 81 % la tasa de infección del coronavirus en el país. Un día antes el profesor John Edmunds, miembro del comité que asesora al Gobierno en la lucha contra la pandemia, admitió en una entrevista a la BBC que la imposición del encierro antes podría haber salvado más vidas.