En fin, lo esperable de ese sacacuartos de ministerio de desigualdad.
En vez de promover cuerpos sanos y saludables con el correspondiente ahorro de sanidad a largo plazo que tendría, vamos a normalizar la obesidad y la horripilancia
Una cosa es que se denigre, discrimine o insulte a personas por ser obesos, otra cosa diferente es que una estado físico tan degradante para la salud se promocione como algo "normal". Una vez más dinero desperdiciado de un ministerio inutil.
No es posible evitar los estereotipos. Nuestro cerebro funciona clasificando en categorías. Por mucho que te digan que verde y amarillo son lo mismo y que los dos son colores, cuando tú ves algo lo ves verde o amarillo