Carlota Pi (Holaluz) se reunió con José Elías (Audax) para sondear su ayuda antes de estallar la crisis

Carlota Pi, fundadora y CEO de Holaluz, se reunió con José Elías, dueño de Audax, la Sirena y otras empresas, para sondear posibilidades de inversión antes de revelar la crisis de liquidez, el aumento de las pérdidas y la posibilidad de ir a preconcurso de acreedores si no encuentra una solución financiera.

Varias fuentes al tanto de las conversaciones confirman que el encuentro se produjo hace dos semanas en el despacho del Elías, en Badalona, tras recibir una llamada de Pi. Según fuentes conocedoras de las conversaciones, la consejera delegada de Holaluz puso encima de la mesa de Elías la posibilidad de invertir en la compañía, que atraviesa una difícil coyuntura: está suspendida de cotización tras quintuplicar pérdidas. Ayer por la mañana, decidió aplazar al 9 de mayo, ya fuera del plazo reglamentario, la presentación de sus resultados auditados, pero a las 21:30 entregó finalmente sus cuentas auditadas.

Estas fuentes señalan que el objetivo expresado en la reunión por la primera ejecutiva y dueña de parte de Holaluz era levantar hasta 150 millones para seguir profundizando en esa línea de negocio, pese a estar cada vez más cuestionada tras los fiascos de otras firmas del sector como EIDF o Solarprofit. Hay que destacar que José Elías, al margen de sus negocios, es uno de los hombres más ricos de España: ocupa la posición 74 en la lista Forbes nacional, que valora su patrimonio en 550 millones de euros. La reunión entre Elías y Pi se celebró, a pesar de que su relación personal en el pasado no ha sido buena, afirman las fuentes consultadas.

Con la cotización en mínimos, la comercializadora de luz, que ha preferido no hacer comentarios para este artículo, admitió ante el mercado el pasado 22 de abril que tenía todo preparado "para firmar esta misma semana un préstamo de 10 millones de euros con el ICF; tres millones de euros con Avançsa, un préstamo convertible con varios Family Offices catalanes de un estimado de dos millones de euros y un "Equity Line" de hasta seis millones de euros del cual se utilizaría el importe que fuese necesario". Tras casi una semana, la compañía no ha confirmado ninguna de las anteriores promesas. En el sector advierten que "el Instituto Catalán de Finanzas no es una ONG y actúa con reglas de mercado". Además, la entidad pública habría pedido garantías personales a los accionistas para desatascar el crédito, algo que por ahora no se ha concretado.

Fuentes del sector creen que la única solución para Holaluz pasa por reestructurar su deuda con una fuerte quita, ejecutar un ERE masivo adicional al que ya aplicó a finales del pasado año para despedir a 200 trabajadores y centrarse en la cartera de más de 370.000 clientes que aún mantiene y el negocio de representación de terceros en el mercado, a la vista de que el modelo de negocio basado en el autoconsumo no acaba de despegar. Ya hace más de un año, presentaba serias dudas.

El problema a corto plazo es de liquidez, señalan fuente del sector, que creen que una potencial venta a un gran actor podría sacar la compañía adelante una vez se acabe con el problema financiero que arrastra la empresa. En el sector acusan a la CEO de la empresa de mala gestión e incluso los dos accionistas que invirtieron en las rondas de financiación llevadas a cabo, Geroa y Axon, habrían pedido su destitución.

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Europa Press

Holaluz se presentó en el mercado como una alternativa sostenible y honesta frente a las grandes eléctricas. "Hemos creado Holaluz para salvar al planeta", dijo Pi en una entrevista en Cinco Días. Sin embargo, con el tiempo acabó sufriendo los problemas del resto (expedientes de sanción de la CNMC, altos precios, etc.). La crisis energética de 2022 golpeó a la compañía, que tuvo que abandonar el negocio de comercialización de gas con un fuerte golpe a nivel de ebitda.

En el mercado destacan el fortísimo gasto en marketing que ha podido quemar buena parte de recursos. Esto le reportó imagen de marca, diversos premios para Carlota Pi como empresaria, aumentar el número de clientes y ganar contratos relevantes como el del Ayuntamiento de Madrid o la compra colectiva de la OCU. También se destacó por algunas alianzas vistosas como la que firmó con Tesla para vender sus baterías para el hogar. Sin embargo, la compañía no ha presentado beneficio neto ningún año y se ha visto obligada a lanzar diversos profit warning al no poder cumplir con las promesas hechas al mercado. En 2021, antes de la crisis energética, prometió alcanzar un millón de clientes en 2023.

Holaluz salió a bolsa en 2019, llegó a rozar los 15 euros de cotización e incluso tuvo ofertas para su venta por más de 300 millones de euros, señala una fuente conocedora de la empresa. Sin embargo, tras la crisis energética y la deriva de la gestión de la firma ha acabado suspendida de cotización cuando rozaba mínimos en un valor de mercado algo por encima de los 50 millones de euros, lo que supone una minusvalía latente para Geroa, que fue el inversor ancla de su salto al parqué, del 50% respecto de su inversión.

Holaluz salió a bolsa en 2019, llegó a rozar los 15 euros de cotización e incluso tuvo ofertas para su venta por más de 300 M

Ahora ya hay quien cree en el sector que el equity de la compañía podría valer cero y la firma se ve atenazada en el día a día con una deuda de más de 60 millones de euros, por lo que su salvación cada vez se ve más complicada, aunque la empresa mantiene en las cuentas aun sin el sello del auditor que la situación de negocio ha mejorado en este inicio de 2024.

Por su parte, José Elías, criticado por algunas empresas del sector por sus formas heterodoxas y nada habituales en el mundo de los negocios, decidió dar un giro a la gestión de Audax en 2022. Puso a Óscar Santos al frente de la misma con el objetivo de contener la deuda y tratar de escalar en bolsa con el fin de varias posiciones cortas que mantenía la compañía. Con el objetivo incluso de dar dividendo ya este año, Audax ha cerrado 2023 con un beneficio de 31,4 millones de euros, cuatro veces más que en 2022. La firma no descarta la compra de Holaluz si esta sale a concurso, afirman fuentes conocedoras de los planes de la empresa.