La RFEF comunicó la sanción pecuniaria y clausura parcial del Cívitas Metropolitano como consecuencia de conductas violentas, racistas, xenófobas e intolerables en el fútbol durante el pasado partido que disputó el Atlético ante el Athletic en el estadio rojiblanco.
Después de los insultados racistas que sufrió Nico WIlliams durante el partido entre ambos conjuntos, la RFEF se basta en el artículo 57.1 del Código Disciplinario de la RFEF, en el que se requiere al club sancionado para que, antes de las 12:00 horas del día 3 de mayo próximo, identifique la estructura de las gradas del recinto deportivo a fin de determinar la zona del estadio objeto de cierre que, según el acta arbitral, afectaría al sector situado en la grada fondo sur del campo.
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A tal efecto, en los dos próximos encuentros a disputar por el Club Atlético de Madrid, SAD en sus instalaciones deportivas, se deberá cerrar el acceso al público en dicha zona, que quedará debidamente acotada, no pudiéndose reubicar a los espectadores que, en su caso, pudieran venir ocupando las mismas con carácter habitual. Además, durante la celebración de los partidos que abarca la sanción de cierre parcial, la zona clausurada deberá mostrar un mensaje visible de condena a los actos y conductas violentas, racistas, xenófobas e intolerantes en el fútbol y apoyo al juego limpio.
Este castigo ya lo recibió el Getafe en la presente temporada después de que desde la grada se pronunciaran insultos racistas sobre Acuña y sobre Quique Sánchez Flores durante el partido que midió al conjunto azulón con el Sevilla. Después de que el club madrileño recurriera la sanción se terminó anulando la pena.
Sorpresa en el club
Ante lo anunciado por el Comité de disciplina el Atlético de Madrid ha mostrado su sorpresa debido a que no se ha llevado a cabo el procedimiento habitual en estas situaciones. Este tipo de castigos no se suelen anunciar con las sanciones del partido y lo normal es que se habrá un expediente al equipo. Ahora, el club rojiblanco tiene diez días para recurrir la sanción al Comité de Apelación, algo que van a hacer porque desde las oficinas del Metropolitano son conscientes de que se ha hecho todo lo posible para evitar este tipo de conductas.
En el club siempre se ha apoyado la lucha contra estos comportamientos, en el momento en el que sucedió se pidió por megafonía que se respetara a los jugadores y se condenó lo sucedido con claridad tanto en el descanso como al final del mismo a través de las redes sociales, del entrenador y del capitán.
Finalmente, el Atlético lanza una reflexión en la que señala que una acción de un individuo no puede castigar a miles de seguidores que han tenido un buen comportamiento ni puede dañar la imagen de un club que ha hecho todo lo posible por localizar y castigar al culpable. De hecho, se ha colaborado con la policía y en cuanto las fuerzas de seguridad correspondientes informen de la identidad del autor se le aplicará una sanción cautelar y una expulsión definitiva si se demuestran los hechos.
