El coste de un eurodiputado: salario de 9.975 euros brutos, dietas y presupuesto de 28.000 euros al mes para contratar asistentes
Los miembros del parlamento europeo también cuentan con distintas dietas para ejercer su labor, que pueden superar los 4.000 euros
Todos los diputados al Parlamento Europeo perciben la misma asignación. Así lo establece el Estatuto único de los diputados, en vigor desde julio de 2009. La cuantía, actualizada para este año 2023, asciende a 9.975,42 euros brutos al mes. Sin embargo, como establece el Parlamento Europeo en su web, este salario está sujeto a un impuesto de la Unión Europea y al pago de una cotización a un seguro de accidentes; lo que deja los salarios de los eurodiputados en 7.776,06 euros netos.
Además, la mayoría de eurodiputados también tienen que pagar un impuesto nacional a su país de origen. Por lo que dependiendo de la normativa fiscal de cada país, esta cifra puede variar. En España, tal y como informó elDiario.es, los eurodiputados están obligados a pagar el IRPF por su sueldo del Parlamento Europeo.
Este salario se abona con cargo al presupuesto del Parlamento Europeo. Según establece el Estatuto único de los eurodiputados, los salarios se fijan calculando el 38,5% del sueldo básico de un juez del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, por lo que los diputados de la Eurocámara no pueden decidir su propio sueldo.
Excepcionalmente, el Parlamento Europeo recalca que los diputados que ya ocupaban un escaño antes de las elecciones de 2009 pueden optar por mantener el sistema nacional anterior en lo que se refiere a las asignaciones (por el que percibían el mismo importe que los diputados nacionales), las indemnizaciones transitorias y las pensiones durante todo su mandato.
El salario base más dietas puede llegar a los 15.000 euros brutos por eurodiputado
Los eurodiputados tienen una dieta diaria fija de 338 euros para cubrir los gastos de alojamiento y gastos conexos que puedan tener al participar en actividades oficiales en Bruselas o Estrasburgo. Si la reunión es fuera de la UE, la dieta se reduce a 169 euros.
Además del salario y esta dieta, los eurodiputados cuentan con 4.778 euros mensuales para suplir gastos derivados de la actividad parlamentaria. Dentro de esta retribución para gastos se puede costear el alquiler de oficina, gasto de teléfonos, compra de equipos informáticos y organización de conferencias, entre otros.
No obstante, el Parlamento Europeo proporciona a sus diputados oficinas equipadas en Bruselas y Estrasburgo, y también pueden utilizar los vehículos oficiales de la Eurocámara si están en misión oficial en una de estas ciudades.
Si los eurodiputados llevan a cabo actividades fuera de su Estado miembro, podrán recibir un reembolso de sus gastos de viaje, alojamiento y gastos relacionados hasta un importe máximo anual de 4.716 euros. En cambio, si las actividades las realizan dentro de su Estado miembro, solo se reembolsarán los gastos de viaje, hasta un importe máximo anual determinado en función de cada país.
28.412 euros para contratar asistentes
El Parlamento Europeo establece una cuantía adicional, aparte del salario y dietas, para que los eurodiputados puedan elegir a sus asistentes. En 2023, la cantidad mensual máxima es de 28.412 euros por parlamentario. Este dinero no se ingresa directamente a los representantes, sino a los mismos trabajadores que escoge cada parlamentario.
Una cuarta parte de los 28.412 euros por diputado, 7.103 euros, se pueden utilizar para pagar servicios prestados por entidades elegidas por el diputado, como por ejemplo para encargos a estudios especializados o de consultoría.
La pensión de jubilación para los eurodiputados
Además de su salario y dietas, los eurodiputados tienen derecho a una pensión de jubilación cuando cumplan los 63 años de edad. La pensión asciende a un 3,5% del importe de la asignación parlamentaria por cada año completo trabajado, El coste de estas pensiones se cubre con cargo al presupuesto de la UE.
Desde julio de 2009, los nuevos diputados no pueden afiliarse al fondo de pensiones voluntario creado para los diputados al Parlamento Europeo en 1989, que se está suprimiendo progresivamente.
