La mascletà que este próximo domingo 18 de febrero se va a celebrar en Madrid -finalmente autorizada por la Delegación de Gobierno y por un juez- lleva consigo el ruido de la polémica, y eso que todavía no ha explotado un solo petardo. Son muchos, empezando por la oposición de Más Madrid y PSOE, los que se preguntan qué necesidad tiene el Ayuntamiento de Madrid de hacer explotar más de 300 kilos de pólvora en pleno parque de Madrid Río, al borde del renaturalizado Manzanares -donde anidan centenares de aves- y a un paso de la Casa Campo, el espacio natural más importante de la ciudad.

La celebración de la mascletà responde a una única razón: el compromiso adquirido el año pasado por José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid,  con su homóloga María José Catalá, la regidora de València. 

En plena precampaña electoral de las elecciones municipales y autonómicas celebradas el año pasado, el alcalde Almeida afirmó durante las fiestas de Las Fallas que si María José Catalá, candidata del PP al Ayuntamiento de València, ganaba las elecciones y se convertía en alcaldesa, él celebraría en Madrid una mascletà.

Dicho y hecho. Menos de un año después, Madrid celebra el evento pirotécnico entre críticas de la oposición y de los grupos ecologistas. Estos últimos ya han advertido que la mascletà será "una masacre para la fauna" que vive en ese espacio renaturalizado desde 2016.

Desde el punto de vista político, la oposición no se ha mordido la lengua. "Los madrileños no tenemos que pagar la fiesta después de que el PP haya ganado las elecciones en Valencia. Estamos en contra de que se haga esta mascletà con esos fines porque el dinero de los madrileños se tiene que gastar en mejorar la calidad de vida de los madrileños", dijo el pasado día 9 de febrero Reyes Maroto, portavoz del PSOE.

Rita Maestre, por parte de Más Madrid, tampoco ha escatimado las críticas: "350 kilos de pólvora en Madrid Río no es una mascletà, es una promesa electoral partidista del PP".

La oposición también censura que a apenas dos días de la celebración del evento el Ayuntamiento todavía no haya informado del coste del mismo. El diario El País informa de que el coste de la mascletà será de 46.000 euros. 

Imperturbable a las críticas, Almeida ha afirmado que la mascletà no se ha organizado en la capital para celebrar la victoria María José Catalá sino para "estrechar relaciones" con la ciudad de València.

Las duras palabras de Catalá y Almeida

Catalá aumentó el agrio tono de la polémica tras llamar "cateta" a la izquierda madrileña por posicionarse en contra de la celebración de la mascletá. La alcaldesa de València incluso acusó a PSOE y Más Madrid de  "valencianofobia". 

Almeida ha suscrito una por una las palabras de su colega valenciana. "La alcaldesa dijo que era una posición cateta, y yo estoy de acuerdo en que es una posición cateta la de todos aquellos que critican esto diciendo que es una montaña de petardos, porque es la expresión literal que utilizó Rita Maestre", ha reprochado Almeida, quien ha subrayado que se trata de un acontecimiento que es Patrimonio Cultural de la Humanidad.

El PSOE ha reaccionado con firmeza a las duras palabras de Catalá y Almeida.  La portavoz del PSOE-M en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, ha instado este viernes a la alcaldesa de València, María José Catalá (PP), a que "pida disculpas".

Maroto también se dirigió a Almeida: "Quiero preguntar a Almeida si está de acuerdo, si va a defender a los madrileños o va a justificar que los madrileños somos catetos, los que nos negamos a que se celebre la mascletá en este entorno que, como sabéis, está protegido porque están "anidando aves y va a suponer un perjuicio para la fauna del entorno", dijo este viernes Maroto, resignada a que el domingo se celebre el evento pirotécnico, que además de pólvora, también ha hecho volar la concordia en Madrid.