- UE La Eurocámara expresa su "profunda preocupación" por los vínculos de Rusia con el independentismo catalán y pide a España que los investigue
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El pleno del Parlamento Europeo ha aprobado este jueves por abrumadora mayoría la esperada resolución sobre la injerencia rusa y los esfuerzos para desestabilizar a la Unión Europea sembrando caos en los distintos estados miembros o apoyando a partidos políticos o movimientos como el independentismo catalán. Un texto que pide seguir investigando el papel del entorno de Carles Puigdemont y que "deplora" la presión sobre los magistrados que lo están haciendo.
El resultado ha sido claro: 433 votos a favor, 56 en contra y 18 abstenciones, ya que contaba con el respaldo de todas las grandes familias políticas. Han votado en contra los propios independentistas Toni Comín, Clara Ponsatí o Jordi Solé. Los diputados de UP o anticapitalistas. Y se ha abstenido Izaskun Bilbao, del PNV. Puigdemont no ha participado, a diferencia de 2021, cuando sí respaldó un informe que pedía en uno de sus apartados que lo investigaran.
El texto final ha incorporado además una serie de enmiendas, como la presentada por el eurodiputado popular Javier Zarzalejos, para añadir una mención a Carles Puigdemont. No en la parte final de condena, sino en la exposición de motivos, cuando en los considerandos se destaca, ahora sí, que "según las informaciones de diversos periodistas de investigación, el exdiplomático ruso Nikolái Sadovnikov se reunió con el entonces dirigente separatista y actual diputado al Parlamento Europeo Carles Puigdemont, en Barcelona, en vísperas del referéndum ilegal de Cataluña en octubre de 2017", dice el texto final.
"Hoy aprobamos en el Parlamento Europeo una resolución importantísima sobre la injerencia democrática de Putin en la UE. Se denuncia y se pide investigar a eurodiputados por sus vínculos con el Kremlin. Puigdemont y la causa separatista catalana quedan señalados a ojos de toda Europa. Es una vergüenza que el PSOE vote investigarle aquí y amnistiarle en Madrid. Siete votos no valen tanta indignidad", ha reaccionado Adrián Vázquez, líder de Ciudadanos e impulsor del texto y algunas de las enmiendas. "Mientras en Europa estamos cada vez más preocupados por la amenaza que suponen las injerencias rusas, Sánchez hace lo posible para que queden impunes en España gracias a su Ley de Amnistía", ha coincidido Zarzalejos.
El texto de la resolución, debatido el pasado martes, establece una vez más que la Eurocámara está "sumamente preocupada por las supuestas relaciones entre los secesionistas catalanes y la administración rusa" y por las campañas de desinformación a gran escala que Rusia ha llevado a cabo en Cataluña, así como por los "supuestos intensos contactos y el número de reuniones entre los agentes responsables de la injerencia rusa en el movimiento independentista". Además, el texto "pide a las autoridades judiciales competentes que investiguen eficazmente las conexiones de los eurodiputados presuntamente asociados con el Kremlin y los intentos de desestabilización e injerencia de Rusia en la UE y sus Estados miembros" y "deplora todos los ataques a los jueces que investigan cualquier actividad de injerencia". Una referencia expresa a lo que está sucediendo estos días con los magistrados que llevan casos como el Voloh.
El PSOE, sometido a mucha presión, ha votado en línea con su grupo europeo, el S&D, que está dirigido precisamente por la española Iratxe García, la persona de confianza de Sánchez en la cámara desde hace años. Han votado en contra de las enmiendas, que no solo pedían la inclusión del nombre de Puigdemont y un par de referencias expresas adicionales a Cataluña en el documento, de 11 páginas, sino que "los casos de los eurodiputados catalanes afectados se remitan al Comité consultivo sobre la conducta de los diputados". Las cuatro enmiendas impulsadas por el PP y Ciudadanos han salido pese a todos.
Los socialistas argumentan que han seguido la decisión del grupo, que había pactado un texto y no veía ninguna necesidad de añadidos adicionales, cuando ya se había encontrado un equilibrio entre los ponentes, que habían lanzado esta iniciativa conjunta. Pero han respaldado el texto que expresamente pide no sólo dejar en paz a los investigadores, sino que "las autoridades judiciales competentes que investiguen eficazmente las conexiones de los eurodiputados presuntamente asociados con el Kremlin y los intentos de desestabilización e injerencia de Rusia en la UE y sus Estados miembros".