ALMERÍA, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha ratificado la pena de siete años de prisión impuesta a un ciudadano argelino como patrón de una patera que permaneció unos cinco días a la deriva en alta mar "sin víveres", por lo que alguno de sus 14 ocupantes, entre ellos dos mujeres, tuvo que ser evacuado hasta el Hospital Universitario Torrecárdenas de urgencia debido a su estado de salud.
En su sentencia, hecha pública este lunes, rechaza el recurso de apelación de la defensa del encausado y confirma en todos sus pronunciamientos en fallo de la Audiencia Provincial de Almería que le condenó por un delito agravado contra los derechos de los ciudadanos extranjeros ya que llegó a poner "en peligro la vida" de los migrantes, quienes que fueron rescatadas con "serios problemas de salud".
La sala comparte con el tribunal de instancia que resulta tanto "creíble como convincente" la declaración de dos testigos protegidos que le identificaron como la persona que estuvo "pilotando desde el principio" la embarcación durante "toda la travesía" desde Orán (Argelia) y añade que, "a mayor abundamiento", estuvieron junto a él "en un espacio de reducidas dimensiones durante cinco días".
Alude, asimismo, al contenido del vídeo aportado a la causa por la Policía Nacional y tomado "con un teléfono móvil por uno de los migrantes" que iba en la embarcación y en el que "aparece por un momento el acusado pilotando, surcando" las aguas "en plena navegación y antes de que se detuviera el motor por la falta de combustible".
El TSJA confirma, asimismo, que procede la aplicación del subtipo agravado del delito ya que en la patera viajaban 14 personas, hubo "un exceso de tiempo que la misma permaneció en tránsito, con absoluta falta de medios de seguridad, especial riesgo para los sujetos pasivos y materialización de resultados lesivos en algunos de ellos".
Según recogen los hechos probados, la embarcación de fibra, de 5,5 metros de eslora y 1,5 metros de manga, partió a las 14,00 horas del 10 de octubre de 2022 de la costa argelina de Orán.
Indica el tribunal que el acusado, "sin pericia, ni la capacitación técnica ni práctica exigida para navegar en alta mar", fue el encargado de pilotar la patera durante todo el trayecto, "valiéndose de un móvil que utilizaba a modo de GPS que portaba en la mano y de una brújula que se encontraba fijada cerca del timón".
Añade el fallo que unas cinco horas después de iniciar el viaje se quedaron "sin combustible", lo que hizo que la embarcación quedase a la deriva cinco días "con momentos en los que el mar estuvo en malas condiciones, entrando agua en la embarcación que tuvieron que sacar sus ocupantes con una botella de agua partida, un bidón y con las manos al no contar con elementos adecuados", por lo que hubo "grave riesgo de vuelco o hundimiento".
Sobre las 10,00 horas del 14 de octubre de 2022 fueron rescatados por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil a unas 44 millas náuticas al sur de Cabo de Gata.
La sentencia remarca que en el viaje "se puso en peligro la vida e integridad de todos los que viajaron a bordo al no reunir la embarcación las condiciones de seguridad mínimas para garantizar la seguridad de la vida humana en el mar".
Subraya que la embarcación "no estaba capacitada para realizar trayectos de 80 millas náuticas, ni para soportar condiciones de viento de entre cuatro y 21 nudos, con visibilidad regular y oleaje" que existieron en el día en el que se intervino la embarcación, "y menos --ahonda-- con tantas personas a bordo".
"La falta de seguridad en la navegación se vio agravada al quedarse sin combustible a las cinco horas de iniciar el viaje, lo que hizo que quedasen a la deriva unos cinco días", señala para concluir que, asimismo, "la falta de víveres provocó que alguno de los inmigrantes tuviesen serios problemas de salud que hizo que necesitasen asistencia médica inmediata al llegar a puerto, peligrando la vida de algunos".
