CATALUÑA
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Inmigración

Junts quiere que Cataluña pueda expulsar a inmigrantes reincidentes y Oriol Junqueras le acusa de "abrazar los discursos de la extrema derecha"

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Los 'posconvergentes' ven el traspaso de competencias como una oportunidad para que el catalán sea "un elemento de integración"

La presidenta de Junts per Catalunya, Laura Borràs; el secretario general de Junts, Jordi Turull; el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y la diputada de Junts Míriam Nogueras, en el Parlamento Europeo.
Los dirigentes de Junts Laura Borràs, Jordi Turull, Carles Puigdemont y Míriam Nogueras.E. P.

"El PSOE fue cediendo, cediendo y cediendo casi hasta el último segundo". Así ha explicado el secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, el cambio de decisión de su partido en la votación de los tres decretos leyes que el Gobierno llevó ayer al pleno del Congreso, dos de los cuales fueron convalidados y el otro derogado por el voto en contra de Podemos.

Más allá de la supresión del artículo que se iba a incorporar a la Ley de Enjuiciamiento Civil que JxCat consideraba que abría la puerta a paralizar la futura ley de amnistía (el 43 bis sobre cuestiones prejudiciales), el principal titular de lo acordado entre el partido de Carles Puigdemont y los socialistas se lo llevó "la gestión integral de la inmigración".

A la espera de que la letra pequeña aclare el alcance del traspaso de competencias a la Generalitat, que se realizará mediante una ley orgánica facultada por el artículo 150.2 de la Constitución, desde las filas posconvergentes se ha apuntado a que el Govern tendrá las atribuciones "en materia de documentación, permisos de residencia o flujos migratorios".

Expulsión de inmigrantes

Pero uno de los principales focos está puesto en la capacidad que pueda tener el Ejecutivo autonómico para decidir la expulsión de inmigrantes en situación irregular que hayan cometido delitos de forma multirreincidente, una reclamación que en los últimos meses han verbalizado varios alcaldes del partido en la provincia de Barcelona y que esta mañana Turull ha confirmado en Catalunya Ràdio que aspira a lograr: "Todo lo que se pueda decidir desde Cataluña es positivo".

El propio secretario general ya había arropado hace escasas semanas las palabras del alcalde de Calella, una turística localidad costera de casi 20.000 habitantes. "Si no han venido a integrarse y a trabajar como hace la mayoría de la población, no tienen cabida en nuestra casa", había expresado el edil Marc Buch en referencia a 11 personas extranjeras, residentes en el municipio, que acumulan más de 200 detenciones.

También el catalán tendrá un papel importante en las políticas migratorias que puedan desarrollarse una vez consumada la delegación de competencias. "Es importante que la lengua sea un elemento de integración para las personas que lleguen a nuestro país", ha señalado la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, en una entrevista en Rac1.

Respuesta de ERC

Desde Esquerra Republicana, partido que gobierna la Generalitat, se ha querido enfriar el logro de su principal rival en el campo independentista. "Para algunos, negociar significa hacer mucho ruido, cuando lo importante son los acuerdos que llegan a entrar en vigor y se convierten en una realidad más allá de un titular", ha reivindicado la portavoz adjunta de ERC en el Congreso, Teresa Jordà, que ha señalado que hay que esperar a ver "la letra pequeña" del pacto y que el Ejecutivo presidido por Pere Aragonès deberá ser partícipe también en ese proceso.

El presidente de Esquerra, Oriol Junqueras, se ha referido también esta tarde al asunto. "Abrazar los discursos de la extrema derecha que criminalizan a las personas migrantes, lejos de resolver las situaciones de pobreza y exclusión, pone en riesgo la cohesión social", ha escrito en la red social X. "Nos jugamos mucho", ha advertido.