Público
Público

España autorizó la venta de 44 millones en material militar a Israel en los seis meses previos a la guerra en Gaza

Amnistía Internacional celebra la suspensión en la venta de armas al país desde el 7 de octubre, pero exige al Gobierno español que sea "integral y permanente" ante los indicios de crímenes de guerra contra la población palestina.

Tropas y vehículos del ejército de Israel toman posiciones cerca de la Franja de Gaza, a 29 de diciembre de 2023.
Tropas y vehículos del Ejército de Israel toman posiciones cerca de la Franja de Gaza, a 29 de diciembre de 2023. Atef Safadi / EFE/EPA

El Gobierno autorizó la exportación de material de defensa para Israel por valor de más de 44 millones de euros durante el primer semestre de 2023, justo antes de que comenzara la guerra entre el Estado judío y las milicias palestinas en la que ya han muerto más de 22.000 gazatíes y más de 50.000 han resultado heridos por los bombardeos indiscriminados sobre la Franja de Gaza.

Así consta en las estadísticas de exportaciones españolas de material de defensa, de otro material y de productos y tecnologías de doble uso, publicadas por la Secretaría de Estado de Comercio. Los datos tienen fecha de 30 de noviembre y se remitieron a la Comisión de Defensa del Congreso el pasado 23 de diciembre.

La organización Amnistía Internacional (AI) se ha hecho eco de estas estadísticas para pedir una vez más al Gobierno español que suspenda de manera "integral y permanente" la exportación de armas y material militar a Israel "hasta que se asegure de que no utiliza esas armas para cometer atrocidades en los Territorios Palestinos Ocupados", recuerda Alberto Estévez, portavoz sobre armas en Amnistía Internacional España.

Suspensión temporal de las exportaciones

El Gobierno suspendió los permisos para exportar material militar a Israel cuando decretó el estado de guerra y lanzó su brutal ataque sobre Gaza. Al menos así consta en los datos públicos y así lo informó el pasado diciembre, en una comparecencia en el Congreso, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. Aunque para AI esta suspensión "no es suficiente" a tenor de las prácticas israelíes en esta y en anteriores operaciones sobre Gaza y la Cisjordania ocupada.

Tras los mortíferos ataques sorpresa de las milicias palestinas en territorio israelí del pasado 7 de octubre, en los que fueron asesinados más de 1.200 civiles y soldados hebreos, la respuesta de Israel ha sido la más letal y destructiva de todas las operaciones militares que ha lanzado sobre la Franja de Gaza. Solo en el primer mes de la guerra, Israel mató a tantos palestinos como en los anteriores 23 años, y la mayoría de las víctimas son mujeres y niños.

Los bombardeos masivos han destruido edificios residenciales, han afectado a centros sanitarios y hospitales, a escuelas del programa de Naciones Unidas, iglesias y mezquitas o campamentos de refugiados a lo largo y ancho del enclave.

"Mucho antes y después de esa fecha Israel ha cometido numerosos presuntos crímenes de guerra y otras infracciones graves del derecho internacional humanitario. Por ello, el Gobierno debe aplicar la prohibición de transferencias de armas a Israel establecida en el artículo 6 del Tratado sobre el Comercio de Armas, ratificado por España en 2014", considera Estévez, experto en comercio de armas.

Bombas, misiles y torpedos

Los datos analizados incluyen 22 licencias de exportación de material de defensa a Israel en la primera mitad de año, entre las que se incluyen armas letales, según precisa AI.

En concreto, los equipamientos autorizados comprenden sistemas de dirección de tiro, vehículos blindados, material para aviones y equipos electrónicos y de formación de imágenes.

Las exportaciones realizadas ascendieron a más de 700.000 euros. De ellos, más de 70.000 euros corresponden a bombas, torpedos y misiles. Más de 600.000 euros fueron en sistemas de dirección de tiro, mientras que otras ventas de armas ligeras, blindados y equipos de formación de imagen tienen un valor desconocido, según el estudio de AI.

"A pesar de que el Gobierno ha alegado en el pasado que se trata de material no letal, esto no es cierto", denuncia Estévez, que precisa que parte de estos equipamientos "son susceptibles de uso en los presuntos crímenes de guerra que Israel lleva cometiendo en los últimos tres meses en Gaza y Cisjordania".

Más exportaciones que en 2022

Las licencias de exportación a Israel del primer semestre de 2023 son muy superiores a las de todo 2022, cuando España autorizó 34 licencias por valor de 9,2 millones de euros. Según precisa AI, ocho de los permisos correspondieron a la categoría de aviones, pero también hubo licencias para armas ligeras, sistemas de dirección de tiro, blindados, equipos electrónicos y de formación de imágenes.

Las exportaciones efectivamente realizadas ascendieron a 2,3 millones de euros que, según detecta AI, "incluyen bombas reexportadas a India y blindados a Filipinas, además de munición, sistemas de dirección de tiro y equipos de formación de imagen".

La organización denuncia que no es posible saber cuántas licencias se concedieron a Israel ni el valor de las exportaciones entre finales de agosto y el 7 de octubre, cuando estalló de nuevo el conflicto y el Gobierno suspendió estas operaciones comerciales con Israel.

España ha paralizado temporalmente las exportaciones de material militar al Estado judío en varias ocasiones, coincidiendo con operaciones israelíes sobre la Franja de Gaza en las que han muerto miles de civiles. Sin embargo, ha continuado proporcionando material al país una vez finalizadas estas ofensivas, alegando que no se utilizan contra la población civil palestina.

Acusaciones de genocidio y otros crímenes de Israel 

Además de serios indicios de crímenes de guerra denunciados por multitud de organizaciones internacionales, incluida la ONU, Israel se enfrenta a una denuncia por genocidio contra la población palestina. Sudáfrica elevó el pasado viernes la acusación ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), el órgano judicial principal de las Naciones Unidas. Israel ha anunciado que comparecerá ante este tribunal, ubicado en La Haya (Países Bajos), para defenderse de la "absurda difamación de sangre" de la que acusa a Sudáfrica.

La Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) –también ubicado en La Haya, pero sin dependencia de la ONU– investiga posibles crímenes de guerra por parte de Israel contra la población palestina, incluso desde antes de la actual guerra.

Piden un embargo de armas europeo

Amnistía Internacional también reclama a España que promueva un embargo de armas europeo y de Naciones Unidas, tanto a Israel como a grupos armados como las milicias de Hamás. Y hace un llamamiento explícito a que el Gobierno español, que se ha destacado por criticar las acciones israelíes y exigir un alto el fuego permanente en Gaza, pida formalmente a Estados Unidos que deje de suministrar armamento a Israel.

Washington es el principal aliado de Tel Aviv y su mayor exportador de material militar, entre el que AI destaca proyectiles de artillería de 155 milímetros. La organización recuerda que esta munición tiene una gran capacidad destructiva y es altamente peligrosa para los civiles en un territorio con una densidad de población tan alta como la de la Franja de Gaza, donde viven más de dos millones de personas en 365 kilómetros cuadrados.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias