El paro descendió en el país en 24.573 personas en noviembre, en la que ha sido la segunda mayor caída del desempleo para este mes sin contar la pandemia, pero esta evolución está distorsionada porque, tras la reforma laboral, todos los trabajadores con contrato fijo discontinuo que pasan a la inactividad e, incluso, empiezan a cobrar una prestación, no computan como parados. En noviembre, un total de 114.000 han pasado al paro pero no cuentan como tal, con lo que el desempleo habría crecido en unas 90.000 personas si se hubieran tenido en cuenta.
Así se desprende de los datos de afiliación y desempleo publicados ayer por los ministerios de Seguridad Social y Trabajo, según los cuales aunque se destruyeron 115.500 empleos asalariados en la hostelería por el fin de la temporada turística, estos no fueron contabilizados en el paro. La razón es que todos ellos eran trabajadores fijos discontinuos.
Dado que los datos de paro registrado no son, por esta razón, fiables, conviene analizar los de afiliación. Estos muestran que el empleo en el país bajó en noviembre en 11.583 personas, un descenso muy inferior al que se ha registrado tradicionalmente en este mes (de 23.219 empleos entre 2014 y 2019), lo que refleja que el mercado laboral se ralentiza ante el entorno de incertidumbre económico pero sigue creciendo. La hostelería fue el sector más afectado por la estacionalidad, pero sus despidos se vieron compensados por las contrataciones en la educación y en el comercio, ante la llegada de las compras navideñas.
"La afiliación a la Seguridad Social sorprendió al alza", señaló BBVA Research. "El número de cotizantes a la Seguridad Social se redujo en 11.600 (2,6% interanual) por causas estacionales, en menor magnitud que la prevista (BBVA Research había pronosticado una caída de 37.200 personas). La evolución bruta de la afiliación fue algo peor que la registrada en los meses de noviembre desde 2020, pero mejor que la mediana de la década pasada. Descontado el componente estacional , las estimaciones de BBVA Research indican que el número de afiliados habría crecido en 25.000, 2.500 más que en octubre".
Desde Funcas han apuntado que "el crecimiento del empleo sigue moderándose", ya que "la Seguridad Social perdió 11.583 afiliados en noviembre, un descenso inferior al habitual en ese mes, que en términos desestacionalizados equivale a un incremento de unos 10.350. Esta cifra se sitúa en torno a la media de los tres meses anteriores, pero es inferior a los cerca de 75.000 nuevos afiliados netos mensuales en la primera mitad del año".