El expresident catalán Carles Puigdemont y el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, se reunirán este sábado, 2 de diciembre, en Ginebra (Suiza), para abrir el proceso de negociación tutelado por un mediador internacional sobre el futuro político de Cataluña. Los socialistas dan cumplimiento así al pacto alcanzado el pasado 9 de noviembre para obtener el apoyo de los siete diputados de Junts a la investidura de Pedro Sánchez. El encuentro, avanzado por El Confidencial y confirmado posteriormente por fuentes posconvergentes y del PSOE, se produce apenas dos días después de que se agotara el plazo fijado con los independentistas, que exigieron un primer encuentro antes de que finalizara este mes de noviembre.

Tanto desde el PSOE como en el seno de Junts han insistido en que quieren mantener la extrema discreción que ha regido en las negociaciones entre ambos partidos para la investidura. Pero los independentistas necesitan demostrar que la negociación arranca y que Sánchez "sí cumple" con Puigdemont. Un argumento que utilizarán en su particular batalla con Esquerra, en la que los de Junts podrán argumentar que "su mesa" ha sido la que ha abierto las conversaciones con el PSOE sobre la celebración de un referéndum de independencia en Cataluña.

Previsiblemente Toni Comín integrará la delegación de Junts, igual que Turull y Nogueras. "No renunciamos a la unilateralidad, pero se lo ponemos fácil a Sánchez", dijo Comín

Este será el primer argumento que Puigdemont pondrá sobre la mesa, tal como recoge el acuerdo suscrito por el PSOE. Junts se ampara en el artículo 92 de la Constitución para asegurar que una consulta de independencia tiene cabida en el marco constitucional, tal como exigen los socialistas. "No hemos renunciado a la unilateralidad, pero se lo estamos poniendo fácil a Pedro Sánchez", argumentaba este lunes Toni Comín, en declaraciones a TVE. Los socialistas, por su parte, apuestan por un despliegue del Estatut de 2006, pero se niegan a todo referéndum de autodeterinación.

Comín, mano derecha de Puigdemont en Bruselas, ha formado parte de las conversaciones para la investidura, y previsiblemente integrará también la delegación de Junts en estas reuniones junto al secretario general del partido, Jordi Turull, y la portavoz en el Congreso, Míriam Nogueras.

Cerdán, por su parte, irá acompañado de su mano derecha, su adjunto en Organización, el diputado Juanfran Serrano. Pero el dirigente tampoco quiso aportar detalles cuando los periodistas le preguntaron al término de la solemne apertura de las Cortes de la XV Legislatura, este miércoles en el Congreso: "Hemos cuadrado las agendas y habrá una reunión, evidentemente. Es una reunión de trabajo, nada más. Cuando hicimos el acuerdo, anunciamos que habría reuniones de este tipo, no es la primera ni va a ser la última. Por tanto, no hay que dar más importancia a una reunión de trabajo".

Es una reunión de trabajo, no es la primera ni va a ser la última. No hay que dar más importancia", alega Cerdán, que acudirá con su dos, Juanfran Serrano

Ninguna de las dos partes quiere revelar el nombre del verificador internacional, que según indicaba la dirección socialista el pasado fin de semana, puede tratarse de una organización, no de una sola persona reputada. Son recurrentes las preguntas de los periodistas a dirigentes del PSOE y del Gobierno, pero la respuesta es siempre la misma: no se dará su identidad, tanto por el compromiso con Junts como con el mediador privado, y también porque la consigna es hacer públicos los acuerdos mientras se mantiene opacidad sobre las negociaciones. En el Ejecutivo, además, se sacuden la cuestión recordando que esta es una mesa entre dos partidos, PSOE y Junts, en la que no interviene el Gobierno. Eso hizo ayer, de hecho, la portavoz, Pilar Alegría. El presidente Sánchez aseguraba la semana pasada a los informadores que viajaron con él a Oriente Próximo que esa figura puede ayudar a vencer las desconfianzas que se tienen los dos partidos.