La instalación tipo de autoconsumo que se realiza en España se ubica en una casa unifamiliar, consta de entre ocho y nueve placas solares y precisa de una inversión inicial que de unos 6.600 euros, de la que es posible recuperar alrededor de la mitad gracias a todo tipo de ayudas estatales, autonómicas y municipales que existen. Al margen de estas cifras, lo que nota de media el consumidor su factura de la luz son unos 856 euros de ahorro anuales, 71 euros al mes.

Estos datos forman parte del estudio sobre el perfil de los usuarios domésticos del autoconsumo y los costes y ahorros asociados a él que ha elaborado la compañía Samara en base a su actividad de lo que va de 2023, el año en el que el sector vaticinaba una "desaceleración" después del boom de 2021 y 2022, entre personas a las que instalaron placas solares y también en base a proyectos realizados aunque finalmente no se llevaran a cabo. En total, son 3.400 casos que permiten hacer una "radiografía" de quién se lanza al autoconsumo, con qué coste y qué ahorros obtiene.

Inversión y ayudas

El "barómetro" señala que la inversión media inicial que es necesario hacer para instalar placas solares en casa es de 6.646 euros, dependiendo del tamaño de la instalación o de las necesidades energéticas de cada hogar. Se suelen instalar una media de 8,5 placas en cada tejado.

De esa primera cantidad, el estudio calcula que es posible recuperar casi la mitad -un 45,6%- con las diferentes ayudas públicas que existen, a pesar de que las más elevadas, las de los fondos europeos tardan en llegar. En todo caso, estima que los hogares con autoconsumo pueden recuperar una media de 3.035 euros gracias a los fondos Next Generation que reparte el Ministerio de Transición Ecológica entre las comunidades, que las hacen llegar a los usuarios y los descuentos que las distintas localidades hacen en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). A ello se sumaría otra rebaja adicional mediante la deducción del IRPF del 20, 40 0 60% en función de la mejora de eficiencia energética que procure el autoconsumo a cada vivienda.

Una vez con la instalación de autoconsumo funcionando, el ahorro en electricidad medio que calcula Samara es de 856 euros al año, unos 71 euros en la factura de cada mes. 

El periodo medio de amortización de la inversión en autoconsumo es de 6,3 años, en los que los ahorros en la factura convivirá con seguir pagando las placas. Sin embargo, estas tienen una vida útil de unos 25 años, de modo que más allá de ese primer periodo hay otros casi 19 años de "ahorro neto". Es decir, el hogar ya habrá terminado de pagar la instalación y mantendrá el beneficio del ahorro en electricidad.

Hombre de entre 45 y 54 años

Además de costes y ahorros medios, el estudio de Samara hace un perfil de la persona que instala autoconsumo doméstico o, al menos, de quien se interesó por ello y solicitó un estudio técnico. 

Lo que dicen los datos, en línea con las dificultades que el propio Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) identifica en los bloques de vecinos, es que en la gran mayoría de los casos el autoconsumo se ubican en casas unifamiliares, el 94,5%.

El barómetro dice también que es cuestión de hombres más que de mujeres, o al menos son ellos los que en mucha mayor proporción (77,7% frente a 22,3%) solicitan el estudio técnico o están en cabeza de la instalación de las placas fotovoltaicas. La medida de edad es de 45 y 54 años (35%), seguido de 55 y 64 (26,3%) y, en menor medida, entre 35 y 44% (21,3%).

El autoconsumo es meramente testimonial (1,96%) en los tramos más jóvenes de edad, con serias dificultades para acceder a una vivienda en propiedad. "La población de entre 25 y 34 años, más tendente a vivir de alquiler, supone solo el 1,96% del total de los interesados. Con el despliegue del autoconsumo colectivo y su presencia en las comunidades de vecinos esperamos ver una mayor representación de esa franja de edad en los próximos años", afirma Manel Pujol, confundador de Samara,