El otoño seco y caluroso valenciano sorprende incluso a los expertos
Cambio climático
Los modelos meteorológicos preveían una estación lluviosa y las temperaturas superan lo esperado
Jorge Olcina anima a los municipios a seguir el ejemplo de Benidorm y diseñar planes de adaptación al cambio climático
El calor llegó ayer a su punto culminante antes de empezar a bajar a partir de hoy.En la imagen, un termómetro en el centro de Valencia, ayer.
Los modelos estacionales hablaban de un otoño cálido y lluvioso en la Comunidad Valenciana, pero salvo las tormentas que pasaron de refilón en septiembre, está siendo un otoño muy seco, preocupantemente seco”.
Jorge Olcina, catedrático de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante, explica a La Vanguardia que la sorpresa ciudadana que generan los 30º que ayer se alcanzaron en València y varios puntos de la Comunidad es de algún modo compartida por los expertos, que esperaban temperaturas superiores a lo que era normal hasta hace pocos años, pero contaban con un otoño lluvioso.
Lo peor es que lo que parecía excepcional se está convirtiendo en tendencia
“Las temperaturas están muy por encima de lo que se preveía y las lluvias están muy por debajo”, afirma Olcina. Lo peor es que lo que parecía excepcional se está convirtiendo en tendencia: “desde 2010, suele llover muy al principio de septiembre, pero en octubre y noviembre, que eran los meses tradicionalmente lluviosos en la zona mediterránea, llueve muy poco”.
Esta variación del clima tiene efectos contradictorios sobre los distintos sectores económicos. “Esto es malo para la agricultura, porque está alterando las producciones agrarias, pero es bueno para el turismo, que está alargando la temporada alta”.
En la imagen, la playa del Postiguet, en Alicante,ayer martes.
De hecho, el aeropuerto de Valencia fue el que más incrementó su pasaje en octubre de toda España, por encima del 21%, seguido por los de Málaga y Alicante, que lo incrementaron más del 17%. Y el número de británicos que visita destinos turísticos como Benidorm ya es tan numeroso en primavera y otoño como en verano.
Según Olcina, todo indica que esa tendencia se acentuará. “Los turistas del centro y norte de Europa evitarán el centro del verano en la zona mediterránea porque está perdiendo confort, con temperaturas muy altas combinadas con mucha humedad, como hemos vivido en los dos últimos veranos, pero en primavera y otoño somos un destino ideal”, asegura.
Para el catedrático alicantino es evidente que el proceso de calentamiento global “va más rápido de lo que se pensaba”
Para el catedrático alicantino es evidente que el proceso de calentamiento global “va más rápido de lo que se pensaba”, por lo que las localidades de nuestro litoral tienen que adaptarse. “Aquí tenemos un factor diferenciador que es el agua del mar”, añade, “que se calienta mucho, en verano está batiendo récords cada año, y eso distorsiona las temperaturas, hace que tengamos más noches tropicales, que las tormentas sean muy intensas cuando llueve, es un cambio climático al que tienen que empezar a adaptarse las distintas actividades económicas y las ciudades, “que tienen que diseñar espacios con sombra, zonas con fuentes de agua, un alcantarillado de mayor capacidad...”.
Por supuesto, esa adaptación ha de tenerse en cuenta en la redacción de los nuevos Planes Generales de Ordenación Urbana que afrontan ciudades como Alicante, que mantiene vigente un anacrónico documento de 1987, pero Olcina recomienda que no se espere, que se actúe de inmediato, y pone como ejemplo a la gran ciudad turística de nuestro territorio, Benidorm.
El ejemplo de Benidorm
La Ley Valenciana de Cambio Climático que se aprobó en el año 2022 obliga a elaborar planes de adaptación en los municipios valencianos de más de 50.000 habitantes. Benidorm es el primero que lo aprobó en un pleno municipal. Incluye más de ochenta medidas para llevar a cabo a corto y medio plazo.
Además de las actuaciones de tipo urbanístico, el documento propone acciones de tipo sanitario -”hay que adaptar la asistencia sobre todo en verano, con los calores tan extremos que estamos sufriendo”-, además de medidas para fomentar la conservación de la biodiversidad, mejorar el diseño y la adaptabilidad de la ciudad, promocionar el uso de energías renovables, el autoconsumo y la eficiencia, y sensibilizar a informar a la sociedad buscando la proactividad de residentes y turistas para minimizar su impacto ambiental.