Alexander Zverev y Jannik Sinner protagonizaron la pasada madrugada un partido para el recuerdo. Una batalla épica de más de cuatro horas y media que se saldó a favor del alemán por 6-4, 3-6, 6-2, 4-6, 6-3 y que se vio empañada por uno de los momentos más lamentables que se recuerdan.
Transcurría el quinto juego del cuarto set cuando, de repente, el alemán paró el partido y se dirigió indignado hacia el juez de silla, James Keothavong. ¿El motivo? Había oído un grito nazi en la grada.
"Acaba de decir la frase de Hitler más famosa que existe. Es inaceptable" se quejó un Zverev visiblemente indignado y que pedía que se tomaran medidas.
En el vídeo se escucha, justo antes de que Zverev vaya a sacar, un grito desde las gradas diciendo "Deutschland über alles" ("Alemania por encima de todo"), una frase del himno alemán ahora eliminada de la letra oficial y vinculada especialmente con el periodo nazi.
El alemán señaló al aficionado, que estaba sentado en una grada detrás del árbitro. En un primer momento, Keothavong pidió a los aficionados que fueran respetuosos con ambos jugadores, pero poco después, durante el siguiente descanso, el aficionado fue identificado por los espectadores sentados cerca de él, y fue expulsado por los servicios de seguridad.
"Se dirigió un comentario despectivo hacia Alexander Zverev. El aficionado fue identificado y escoltado fuera del estadio", dijo el portavoz de la Asociación de Tenis de Estados Unidos, Chris Widmaier.
Alexander Zverev se las verá en cuartos de final con Carlos Alcaraz, con quien tiene un balance positivo de 3-2, aunque en los octavos de Madrid, esta temporada, el murciano le barrió (6-1 y 6-2) en un momento el que todavía estaba recuperando su nivel después de la grave lesión de tobillo en Roland Garros 2022, donde sí pudo con Alcaraz.