Fernando Grande-Marlaska se reunió a principio del mes de marzo con sus homólogos de Italia, Chipre, Grecia y Malta para intentar mitigar la inmigración ilegal que azota a estos países. El objetivo de aquel encuentro era el de tomar medidas que resultan decisivas y, sobre todo, efectivas ante la realidad con la que tiene que luchar los países del Mediterráneo sur.
Pese a las cesiones de Sánchez 'entregando' el Sáhara, Marruecos no ha cumplido su parte de contener la inmigración y el flujo de migrantes no deja de crecer. De acuerdo con el último informe del Ministerio del Interior, España se ha convertido en un país al que le cuesta contener la imnigración irregular por mar y tierra.
De hecho, la llegada de migrantes a la Península y a Baleares se ha incrementado en 2023 un 48% (3.000 personas indocumentadas más) en sólo un año ya que ha pasado de 6.359 el pasado ejercicio a 9.409 en 2023. Lo hicieron en 744 embarcaciones Según el último balance de entradas irregulares de inmigrantes publicado este viernes por el Ministerio del Interior, desde el 1 de enero hasta el 31 de agosto, 21.780 migrantes han entrado en España, la mayoría por vía marítima: 21.025 personas, lo que supone un 22,5 por ciento más con respecto a los ocho primeros meses de 2022, cuando arribaron las costas 19.007 inmigrantes.
La tendencia a la baja registrada en la llegada de pateras durante buena parte del año se rompió, sin embargo, en la primera quincena de julio y se ha ido elevado con el paso de las quincenas hasta el cierre de agosto con un incremento elevado en las entradas a través de la Península y Baleares.A pesar del aumento de entradas por la costa Mediterránea este verano, Canarias sigue siendo el destino mayoritario de las embarcaciones con migrantes. En estos ocho primeros meses, se han contabilizado 11.439 personas llegadas en 212 pateras a las islas frente a los 10.637 del mismo periodo anterior. Esta cifra supone un 7,5% más que en el año anterior como consecuencia del aumento de llegadas en la última quincena de agosto.
Mientras, en estos ocho meses del año el mayor incremento con respecto a 2022 se sitúa en las llegadas en patera a la Península y Baleares, donde han llegado 9.409 personas en 744 embarcaciones, lo que pone más de 3.000 migrantes más y un aumento del 48%.
Los datos y la oleada de migrantes que han arribado a las costas de Andalucía y Granada el pasado fin de semana (700 en dos días según la Guardia Civil) ha rescatado viejas reivindicaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. También de las agrupaciones.
Desde la mayoritaria asociación del Instituto Armado, Jucil, hay un especial reproche al Gobierno en funciones. Su secretario de comunicación, Agustín Leal, criticó duramente la política en extranjería y también los datos.
"No se puede dar la solicitud de asilo a quien entra ilegalmente porque vendrán más, el efecto llamada de lo laxo de nuestra política migratoria llega desde Asia a media África. Hay que aplicar la ley, pues la tenemos, para hacer frente a esto", reflexiona.
"El traslado desde Marruecos a las costas del sur de España en las embarcaciones del 'narco' cuesta entre ocho y diez mil euros y son en su mayoría marroquíes y argelinos", finaliza Leal.