El infame príncipe rumano del siglo XV Vlad III, conocido como Vlad el Empalador o Vlad Drácula, dejó tras de sí un legado de gran brutalidad. Pero un equipo de investigadores ha descubierto ahora nuevos datos sobre su vida analizando documentos originales escritos de su puño y letra. Utilizando técnicas innovadoras, han detectado material biológico conservado en cartas escritas y firmadas por Vlad.

Vlad III gobernó Valaquia, en la actual Rumanía, durante un turbulento periodo en el siglo XIV. Fue famoso por torturar y ejecutar a miles de personas por empalamiento, lo que le granjeó una temible reputación. Siglos más tarde, el escritor Bram Stoker asoció el nombre y la sangrienta leyenda de Vlad con su icónico vampiro, el Conde Drácula.

Para saber más sobre el Vlad histórico, los investigadores estudiaron tres cartas raras escritas por él a mediados del siglo XV. El equipo utilizó un novedoso método de muestreo llamado EVA, acetato de vinilo y etileno. Esta película polimérica no invasiva extrae suavemente proteínas y otras biomoléculas de las superficies sin dañar los valiosos artefactos. Cuando se combina con el análisis por espectrometría de masas, el EVA ofrece información sobre materiales orgánicos antiguos.

Una de las cartas de Vlad analizadas | foto Maria Gaetana Giovanna Pittalà et al. / Anal. Chem.

Los investigadores aplicaron películas de EVA a las tres cartas de Vlad, dos de 1475 y una de 1457. La espectrometría de masas identificó unos 100 péptidos humanos antiguos, presumiblemente procedentes de Vlad, dado que fue él quien escribió las cartas.

El análisis también detectó 2.000 péptidos no humanos procedentes de microbios, que sugieren el entorno y las condiciones de la Valaquia del siglo XV.

Varios hallazgos proporcionaron pistas tentadoras sobre la salud y las aflicciones de Vlad Drácula durante su vida. Algunas proteínas humanas apuntan a una posible inflamación crónica de las vías respiratorias y la piel.

Otra de las cartas analizadas | foto Maria Gaetana Giovanna Pittalà et al. / Anal. Chem.

Y lo que es más sorprendente, los péptidos indicaban que Vlad podría haber padecido una enfermedad llamada hemolacria, que provoca lágrimas sanguinolentas. Los relatos históricos describen a Vlad con unos ojos aterradores que parecían «llorar lágrimas de sangre».

Aunque no son exhaustivos, estos hallazgos proteómicos ofrecen una visión sin precedentes de un célebre gobernante medieval. También demuestran el potencial de aplicar la EVA y la espectrometría de masas para desvelar secretos conservados en documentos antiguos sin dañar estos frágiles artefactos históricos. Los investigadores esperan que este enfoque pionero pueda arrojar luz sobre otros escritos y artefactos importantes de nuestro pasado colectivo.

Aunque conocido por su violencia, el Vlad histórico luchó ferozmente para defender Valaquia de las potencias extranjeras. Mientras que el Drácula de Stoker hizo inmortal a Vlad en la literatura, este análisis proteómico ayuda a resucitar a Vlad el Empalador como un complejo gobernante medieval. La información extraída de las cartas de Vlad nos acerca a la comprensión del hombre que se esconde tras el horrible mito.


Fuentes

Maria Gaetana Giovanna Pittalà, Antonella Di Francesco, Annamaria Cucina, Rosaria Saletti, et al., Count Dracula Resurrected: Proteomic Analysis of Vlad III the Impaler’s Documents by EVA Technology and Mass Spectrometry, Analytical Chemistry (2023). DOI:10.1021/acs.analchem.3c01461


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