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El PSC ofrece a Junts y ERC apoyar una quita multimillonaria de la deuda catalana con el FLA

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Illa propone que el Gobierno cree "un coeficiente de condonación" abierto a otras CCAA para perdonar una "parte importante" de los 70.000 millones que adeuda la Generalitat al Estado

Salvador Illa y Pedro Sánchez en su último mitin de la campaña electoral
Salvador Illa y Pedro Sánchez en su último mitin de la campaña electoralDavid Ramirez / Araba PressAraba

Si Pedro Sánchez logra sacar la autodeterminación de la negociación con Junts y Esquerra Republicana y limitarla al terreno económico, el precio de su investidura sería también enorme.

Una de las posibles concesiones es una quita de deuda, porque se ofrece a apoyarla «en parte» el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC). El partido de Salvador Illa es cada vez más clave e influyente para Sánchez, porque éste resiste gracias al éxito electoral en Cataluña.

El PSC acaba de formalizar que apoya una condonación de la deuda contraída por Cataluña con el Estado por el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), según una enmienda parlamentaria que pasó inadvertida el pasado jueves.

Junts y Esquerra aprobaron ese día una moción en el Parlament sobre «los agravios económicos y fiscales del Estado español hacia Cataluña» y dejaron claro que exigen la quita total para aceptar la investidura.

Ante esta moción,. el PSC presentó la citada enmienda que, según ha comprobado este diario, apoya una quita parcial. Según el texto, Illa quiere «un plan de saneamiento de deuda de todas las comunidades», pero presenta una fórmula que resulta ser a la medida de Cataluña. Respalda «la definición de un coeficiente de condonación de esta deuda que tenga en cuenta las necesidades de gasto de los servicios públicos fundamentales de la Generalitat». También «el impacto que la caída de ingresos derivada de la Gran Recesión a partir de 2008 tuvo en los ingresos tributarios de las administraciones y su repercusión en las transferencias a la Generalitat». Y, además, «los efectos económicos y financieros que la no actualización de los mecanismos de cálculo de la financiación autonómica desde 2014 hayan tenido en el crecimiento de la deuda de la Generalitat». Es decir, en esto último sería compensar a Cataluña porque los últimos gobiernos, incluido el de Sánchez de los últimos cinco años, no han actualizado el modelo de financiación.

El PSC no da una cifra sobre a cuánto puede ascender la quita, pero su portavoz Jordi Riba, asegura que se trataría de «una parte importante». La deuda de Cataluña con el FLA supera los 70.000 millones, según el último dato oficial del Banco de España, y condonarla supondría que el Estado no recuperaría los prestado desde que se creó la ayuda en 2012.

En el PSC defienden que el «coeficiente de condonación» operaría también para otras comunidades y es cierto que, según se formule, podría beneficiar también, por ejemplo a la Comunidad Valenciana que ahora preside el popular Carlos Mazón.

De momento, los independentistas quieren más y combinan exigencias políticas con crecientes reivindicaciones económicas. Si el lunes ERC planteó como condición «acabar con el déficit fiscal [la presunta diferencia entre lo que aporta Cataluña y lo que recibe del Estado]» que equivale a recibir 20.000 millones extra anuales, la semana terminó con la citada moción. En ella, aprobada, por el partido de Carles Puigdemont y ERC se incluye «plantear la condonación de la deuda del FLA basándose en la infrafinanciación sufrida por Cataluña en el ámbito social durante décadas».

También, un modelo de financiación en el que si Cataluña es el tercero que más aporta debe ser también de los que más recibe. «No habrá investidura si no se resuelven estos problemas y otros como la amnistía y la autodeterminación», dijo desde la tribuna el diputado de Junts y ex presidente de la Cambra, Joan Canadell. Éste y ERC no aceptaron la quita parcial que ofreció Illa, así que el PSC terminó votando en contra.

Pero la actitud socialista muestra que puede ser un terreno de negociación. Tiene apoyo de Sumar, vía su brazo catalán y el ministro de Cultura en funciones, Miquel Iceta, ya defendió la condonación parcial cuando era líder del PSC. Ahora el partido influye más y la necesidad de Sánchez del independentismo, acuciante.

El problema de condonar es que, además de mermar recursos del Estado, implicaría un agravio a los que han intentado no recurrir a los fondos estatales de financiación y endeudarse por su cuenta en los mercados -como es el caso de Madrid o Castilla y León- o hacerlo lo menos posible como la Xunta de Galicia en la etapa de Alberto Núñez Feijóo.

Por otra parte, la moción independentista incluye «una campaña de comunicación para explicar el impacto de la infrafinanciación en forma de impuestos más altos donde la Generalitat tiene competencias, respecto a las comunidades que no sufren infrafinanciación». Apunta a campaña de intoxicación, porque Cataluña aporta un 17% más que la media, pero Baleares, un 21% y Madrid, un 40%. Y en cuanto al FLA, Cataluña es el máximo beneficiario, mientras Andalucía, Extremadura y tantas otras mantienen una baja renta per cápita en su interminable carrera por alcanzar a las prósperas.

La efeméride/EL 23-J Y LOS DATOS ECONÓMICOS

Quince años ha llevado bajar el nivel de paro en España al que tenía en 2008, lo que da idea de las disfunciones del mercado laboral. El propio Pedro Sánchez, lo reivindicó el jueves tras el gran resultado de la EPA del segundo trimestre: «Alcanzamos un nuevo máximo histórico. Baja la temporalidad y el paro se reduce hasta el nivel más bajo desde 2008, especialmente en jóvenes y mujeres». Los buenos datos de este trimestre en empleo y crecimiento del PIB muestran que el 23-J fue una fecha bien elegida por Sánchez para el PSOE desde el punto de vista económico. El impulso del primer semestre han revisado al alza todas las previsiones -incluidas la del FMI y CEOE- y el 23-J ha sido justo antes de que se viera que la inflación subyacente vuelve a superar el 6% y de que el PIB del segundo semestre apunta lamentablemente a peor.

El personaje/ BRUSELAS EXAMINA SU DECRETO DEL TAXI

La Comisión Europea ha notificado formalmente a las asociaciones de VTC que va a evaluar si el último decreto impulsado en favor del taxi por la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, supone una vulneración de las reglas comunitarias. «La Comisión evaluará el Real Decreto de 28 de junio de 2023 sobre los taxis y VTC con vistas a su compatibilidad con el artículo 49 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea», según la misiva a la que ha tenido acceso este diario. Este artículo es el que prohÍbe limitar la libertad de establecimiento de cualquier empresa. Por tanto, también de Cabify y cualquier otra VTC. Además, en otra carta, la Comisión asegura que ha iniciado peticiones de información sobre la legislación española previa a este decreto. Calviño dijo que respeta la normativa de la UE.

Para seguir/CAE MÁS EL CRÉDITO EN ESPAÑA

En un banco tan internacional como el Santander es interesante ver cómo evoluciona la partida de «préstamos y anticipos a la clientela» como indicador económico. Según los datos que acaba de publicar el grupo que preside Ana Botín, esta actividad crediticia creció un 1% en el primer semestre con respecto al mismo período de 2022, pero con grandes diferencias. En Norteamérica crece a ritmos del 5% y en Sudamérica, al 8%. ¿Y en Europa? Subida en Polonia, pero descenso en Reino Unido, Portugal y, sobre todo, España. Los préstamos del banco en España «caen un 6%, en línea con el mercado, principalmente afectados por la amortización anticipada de los créditos hipotecarios y la menor demanda de financiación a largo plazo por parte de las empresas». Mala señal de inversión empresarial futura.

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