Tras el último artículo de Elon Musk, despertamos la curiosidad de Marte con el siguiente espectacular vídeo.
Se trata de un montaje a partir de un álbum con más de 50.000 fotos de Marte. Se han necesitado 12 años captando instantáneas con la cámara HiRISE de la estación Mars Reconnaissance Orbiter.
Las imágenes anaglifo de Marte tomadas por la cámara HiRISE contienen información sobre la topografía de la superficie de Marte. Hay cientos de imágenes de alta resolución de este tipo, dando la oportunidad de crear diferentes montajes en 3D.
En esta película Jan Fröjdman elige algunos espectaculares escenarios de Marte para crear un viaje que parece casi real al montar clips imagen tras imagen, a partir de 33.000 puntos de referencia. Tres meses de trabajo en total. El resultado es un vídeo que nos da la sensación de estar volando por encima del planeta rojo, mirando hacia abajo, observando lugares fascinantes en este árido planeta.
A todos nos encantaría poder ver imágenes tomadas por un fotógrafo en Marte, pero por ahora lo mejor que podemos hacer es conformarnos con este paseo semi-virtual.
Los colores de esta película son falsos porque las imágenes anaglifas se basan en imágenes en escala de grises. Jan transformó los clips en color con cierta moderación. Las regiones más brillantes son amarillentas y las regiones más oscuras algo azuladas. Los clips de las regiones polares (los últimos clips en la película) tienen un tono blanco-azul. Hay un montón de opiniones y estudios de lo que los colores naturales en Marte podrían ser, pero las regiones oscuras de polvo a menudo parecen tener un tono azulado.
Jan recalca que esta película no es científica, es la obra de un entusiasta del espacio que trata de visualizar el planeta vecino a su manera.
El vídeo comienza con un acercamiento cercano a la luna de Marte Phobos.
Algunos de los anaglifos utilizados se pueden ver en: https://av-creo.com/fictive-flight-real-mars
Las erosiones geológicas producidas por el agua en Marte (y en concreto las «líneas recurrentes en pendiente») recuerdan a veces tanto a nuestra Tierra, que a uno se le hace difícil pensar que no pueda haber algún tipo de vida en el subsuelo de Marte:
