Muere a los 96 años Tony Bennett, una de las grandes voces del siglo XX

Muere a los 96 años Tony Bennett, una de las grandes voces del siglo XX

El 'crooner' fue diagnosticado de Alzheimer en 2016.

Tony Bennett en un show de la NBC, en una imagen de archivo.NBC NewsWire

El legendario cantante estadounidense Tony Bennett ha muerto este viernes a los 96 años en Nueva York. En 2021, la familia del artista hizo público que Bennett padecía alzhéimer. Había recibido su diagnóstico en 2016, y fue en 2018 cuando empezó a mostrar los primeros signos de su declive mientras preparaba un nuevo álbum con Lady Gaga, cuatro años después de haber alcanzado el éxito con un álbum juntos. 

La enfermedad fue avanzando poco a poco, hasta limitar la capacidad de Bennett para continuar sobre los escenarios, de los que tuvo que retirarse en 2021. Según su esposa, Susan Crow, era precisamente la música su mayor aliada para batallar en contra de esta enfermedad degenerativa. “Ya no es el viejo Tony, aunque cuando canta sigue siendo él”, aseguró entonces la esposa del músico.

El intérprete se hizo reconocido por su peculiar forma de cantar, suave y murmurante, sin proyectar la voz, y por éxitos como The Way You Look Tonight. Su carrera comenzó en 1951 y durante sus siete décadas de dedicación a la música vendió más de 50 millones de discos y ganó 18 premios Grammy. 

Disfrutó de un resurgimiento en los noventa, adquiriendo popularidad entre el público joven, en parte por una aparición en el festival MTV Unplugged. Su colaboración de 2014 con Lady Gaga, Cheek To Cheek, debutó en la primera posición de las listas de éxito de Billboard.

Tras el fracaso de su primer matrimonio, con Patricia Beech, con quien tuvo dos hijos, Danny y Deagal, Tony Bennett se casó de nuevo con la aspirante a actriz Sandra Grant en 1971. Junto a sus dos hijas, Joanna y Antonia, la familia se mudó a Los Ángeles, donde el músico adoptó un estilo de vida de fiestas interminables y cocaína que “fluía tan libremente como el champán” como expresó en su autobiografía de 2007, La buena vida.

En plena vorágine de dinero, fama y éxito, aturdido por el alcohol y las drogas y acorralado por la Hacienda estadounidense, Bennett cayó inconsciente en una bañera debido a una sobredosis. Su entonces esposa lo rescató, aunque fue el principio del fin de su segundo matrimonio. Bennett parecía haber tocado fondo, pero conoció a la que fue su esposa desde ese momento y hasta el final de sus días: Susan Crow, una profesora y gran admiradora del músico cuyo primer encuentro surgió tras un concierto.

Columbia Records, fichó a Bennett en 1950 y el cantante alcanzó el estrellato en 1962 con el lanzamiento de su canción I Left My Heart in San Francisco. Frank Sinatra lo describió a Bennett como el cantante popular más grande del mundo.

Bennett también dejó marca en el cine, debutó en la gran pantalla de en 1966 con El Oscar y en 1999 en se interpretó a sí mismo en la comedia Analyze This en la que los protagonistas eran Robert De Niro y Billy Crystal. Volvió a interpretar una versión de sí mismo, pero esta vez animada, en Los Simpson

Pese a no haber parado de cantar desde los años 50, Bennett solía decir que nunca había trabajado un día en su vida, porque le encantaba actuar.