CRÓNICA
INSULTOS
De Cerámicas del Reino a trabajar con Irene Montero

El faltón podemita del Ministerio de Igualdad: "Fachas, nazis, homófobos, putas... Mañana estaréis en la calle"

Actualizado

"Trabajo con Irene Montero. Me detenéis porque soy de Podemos y gay", soltó a unos policías en el aeropuerto de Santiago. Es hijo del propietario de Cerámicas del Reino, que suspendió pagos dejando una deuda de seis millones

Andrés del Reino, funcionario y asesor en Igualdad.
Andrés del Reino, funcionario y asesor en Igualdad.

«Sois policía iraní, yo pensaba que esto sólo sucedía en Irán. Me detenéis porque soy de Podemos y gay. Mañana no tendréis uniforme. Estaréis en la calle. Trabajo en el equipo de Irene Montero... Fachas, nazis, homófobos, puta...» Eran las diez de la noche en el aeropuerto de Santiago de Compostela y José Andrés del Reino Cárdenas llevaba ya un buen rato insultando, primero a las azafatas que atendían el mostrador en la compañía aérea Ryanair y después a los dos policías a las que estas llamaron. «Refieren las empleadas», dice el atestado de aquella noche, «que la persona que las ha estado grabando con el móvil se encuentra muy agresivo, por lo que no se le permitirá embarcar».

Andrés del Reino no dejó de gritar mientras los policías atendían y preguntaban a las azafatas. Intentaron calmarlo, y «tras varios intentos de resultado negativo», le pidieron el Documento Nacional de Identidad, y cuando todas las veces se negó, se lo llevaron a las instalaciones policiales donde iba a montar, junto con su pareja, que no dejaba de grabar, otro espectáculo en el que tuvo que intervenir hasta la Guardia Civil y que acabó con un policía contusionado. De camino a las dependencias policiales fue cuando soltó ese despliegue de prepotencia: «Mañana no tendréis uniforme, estaréis en la calle. Trabajo en el equipo de Irene Montero». Y, según su entorno familiar, así es: fue Irene Montero la que le llamó al ministerio de Igualdad para que desempeñase allí funciones de asesoría. Se lo llevó como trofeo cuando él estaba desempeñando sus labores como alto funcionario (nivel 29) en el Departamento de Carmen Calvo, la vicepresidenta feminista archienemiga de Montero que acabaría perdiendo su cargo.

Pero la trayectoria y los orígenes familiares de Andrés del Reino no vaticinaban ese destino. O quizás sí. Andrés del Reino es funcionario de carrera y entró por oposición en la dirección General de Tráfico. Sus habilidades le llevaron, entre otros, al ministerio de Sanidad y al de Política Territorial cuando el presidente era Mariano Rajoy y al Palacio de la Moncloa con el Gobierno de Pedro Sánchez, a las órdenes de Fernando Martín, que era y es el secretario de Estado de Memoria Histórica, antes de su salto a Igualdad.

Andrés del Reino es jienense, nacido en el seno de una familia conservadora muy conocida en la localidad de Bailén porque logró levantar la empresa Cerámicas del Reino, con 3.000 operarios, dedicada a la fabricación de tejas, ladrillos y azulejos, que fue fundada en 1973. El padre, Juan del Reino, no logró superar la crisis de 2008 provocada por la burbuja de la construcción y la empresa tuvo que detener su actividad al no poder hacer frente a las deudas y entrar en concurso de acreedores. Arrastraba una deuda de seis millones de euros en aquellos momentos. Sin embargo, la familia hoy, pese a tan abultado débito, ha logrado resurgir de nuevo y se encuentra en una buena posición económica, lo suficientemente buena como para haber emprendido otros proyectos empresariales. Entre sus miembros está el presidente de la asociación de empresarios ceramistas de Bailén, cuñado del patriarca.

Según fuentes de la familia, a la estela de ese mundo empresarial se ha sumado la pareja de Andrés del Reino Cárdenas, un ciudadano mexicano, que también tuvo su participación en la performance agresiva del aeropuerto gallego y que, socio de la cooperativa de la localidad jienense, ha realizado inversiones en el cultivo de olivos y producción de aceite.

Parte médico que indica contusiones provocadas por la acción de Del Reino y la hinchazón en la mano de uno de los policías que procedió a su detención
Parte médico que indica contusiones provocadas por la acción de Del Reino y la hinchazón en la mano de uno de los policías que procedió a su detención

El episodio protagonizado por Andrés del Reino, ha tenido sus momentos chocantes en Jaén. En las horas posteriores a los hechos, Cuca Gamarra, la portavoz del PP en el Congreso hizo público un tuit en el que preguntaba al presidente, refiriéndose al funcionario requerido por Montero: «¿A este tampoco lo puede cesar?». El tuit hizo que el alcalde de Bailén, también del PP, se sintiese algo incómodo y provocó que los socialistas fuesen en procesión ayer a casa del empresario para hacerle ver lo mal que estaban tratando a su hijo, los dirigentes de las siglas con las que dicen que simpatiza.

Chascarrillos locales aparte, el atestado describe cómo Andrés del Reino, una vez en las instalaciones policiales, «arremetió «varias veces contra el agente», golpeándole en el hombro sin conseguir pasar, «mientras otro varón que resulta ser su acompañante, trata de facilitar su huida abriendo la puerta mientras grababa los hechos con el móvil». El agente tuvo que pedir ayuda a su otro compañero y a otra agente de la Guardia civil. Consiguieron reducirle «utilizando la mínima fuerza imprescindible y procediendo a engrilletarle». El parte médico del agente policial revela una «contusión en el hombro» y una «contusión de la mano izquierda» que, en las fotos proporcionadas por el funcionario policial a su sindicato de referencia, el SUP, aparece con una llamativa hinchazón y con heridas consecuencia de su aprisionamiento intencionado con una puerta por parte del agresor. Con el forcejeo, a uno de los policías se le cayó el móvil y sólo una llamada delatora reveló que estaba en poder de la pareja de Andrés del Reino, que se negaba a entregarlo. Fue acusado de hurto. El asesor podemita pasó a disposición judicial después de pernoctar en el calabozo y fue puesto en libertad al día siguiente.

El SUP le hizo llegar una carta al ministro Grande Marlaska en la que solicitaba, dada «la escalada de violencia existente», y «los balances de criminalidad donde las cifras reflejan una estela ascendente año tras año, un endurecimiento de las condenas por atentado a la autoridad. «De una forma destacada el artículo 550 y siguientes del Código Penal que han dejado de tener un carácter represivo». Para que no todo quede en una multa que los afectados, pueden pagar de forma más que sobrada, por muy podemitas que sean.

Lo cierto es que, por el momento, los policías que le detuvieron siguen en sus puestos e Irene Montero, a la que mencionó como si fuera la prima de Zumosol, se ha puesto de perfil alegando que la vida privada de un funcionario no compete al ministerio. Y nada más.

Conforme a los criterios deThe Trust Project

Saber más