Los países con mayor proporción de gente en la cárcel

Los datos que arrojan las estadísticas carcelarias suelen ser bastantes reveladoras sobre la realidad social y política que atraviesa un país. Gracias al World Prison Brief, una proyecto de investigación de la Universidad de Londres, se pueden observar algunas cuestiones interesantes si miramos el porcentaje de población que pasa sus días entre los muros de una cárcel.

Los factores que pueden llevar a una persona a una cárcel son numerosos, empezando por los motivos que pueden hacer que cometa un delito —incluyendo qué es delito y qué penas conlleva en cada país— y pasando por la calidad y garantías de la Justicia y por supuesto la propia existencia de cárceles en condiciones en las que alojar a los condenados.

Con este cruce de variables de casi infinitas combinaciones, nos encontramos con llamativas coincidencias: en cualquier parte de la lista de países con mayor proporción de población encarcelada encontramos juntos países pobres y países ricos y países democráticos con países autoritarios. Más allá de la aparente casualidad, cabe matizar que también existe cierta causalidad.

Los países con Estados de derecho sólidos y asentados, es decir, con capacidad efectiva de capturar delincuentes y llevarlos ante la Justicia, hacen a menudo depender sus cifras de la severidad del sistema: aquí destaca Estados Unidos, que pese a que ha conseguido descender algunos puestos en los últimos años -en 2018 lideraba la lista con 605 presos por cada 100.000 habitantes, frente a los 505 de 2020-, sigue siendo el sexto país del mundo con más porcentaje de población encarcelada debido a su sistema judicial, tremendamente estricto e imbuido de una lógica punitiva. Lo contrario a lo que sucede en lugares como Noruega, Dinamarca o Suecia, cuyo sistema, además de prevenir en mayor medida el delito, está orientado a la reinserción de los presos y no al castigo.

Los países con las cárceles más superpobladas

Precisamente en la otra cara de la moneda están países enormemente pobres y desiguales en los que, por carecer de instituciones y un Estado sólido, los niveles de impunidad son muy elevados, lo cual hace muy difícil llevar a muchas personas que cometen delitos ante la Justicia —lo cual redunda en bajas tasas de población encarcelada—.

También se podría pensar que los países autocráticos lideran la lista por sus mayores niveles de persecución y represión política, pero tampoco es necesariamente así. De entre las miles —o millones— de personas que pueden poblar las cárceles de un país, una proporción relativamente baja de estas son presos políticos, y a menudo su lugar en la lista depende más de los niveles de desigualdad o de corrupción que de su nivel de autocracia.

Los países con mayor número de presos en la cárcel

Así países como Turkmenistán o Cuba también se encuentran entre las primeras posiciones. La Filipinas de Duterte, con su severa guerra contra las drogas, llevaron a un rápido aumento de la población carcelaria en el país, que alcanzó los 179 presos por cada 100.00 habitantes en 2018. No obstante, desde entonces, las cifras se han ido reduciendo.

Otro país que ha seguido una política similar a Filipinas a sido El Salvador de Bukele, que en su guerra contra las maras y el narcotráfico ha llevado a una dura campaña de encarcelamiento en un país que ya tenía un sistema punitivo muy duro y donde hasta un aborto involuntario se paga con la cárcel. Lo que ha hecho que el pequeño país centroamericano lidere el listado de países con mayor proporción se su población encarcelada.