La red de refugiados ucranianos que movía 'maría' en caravanas de ayuda humanitaria

Llegaron a España huyendo de la guerra que asola a su país y solicitaron la aplicación del Estatuto del Refugiado para que pudiesen comenzar una nueva vida. Pero algunos decidieron aprovechar esa oportunidad para tratar de prosperar en negocios turbios. La Guardia Civil ha desarticulado una organización de narcotraficantes asentada en la Costa del Sol y que estaba compuesta mayoritariamente por refugiados ucranianos que realizaban envíos de marihuana hacia Alemania en caravanas de ayuda humanitaria cuyo destino final era Ucrania. Algunos miembros de la red ya habían comenzado a dar los primeros pasos para asentarse en Málaga con la realización de inversiones y accediendo a viviendas en las que fijar su residencia.

Fuentes consultadas por este periódico señalaron que los investigados, una vez entraron en el país escapando de la invasión rusa, y comenzaron a tramitar la concesión del estatus de refugiado, supuestamente contactaron con productores de cannabis asentados en los municipios granadinos de Moraleda de Zafayona y Atarfe para hacerse con distintas partidas de esta droga. El plan era hacerla llegar hasta Alemania, donde esta sustancia llega a multiplicar por seis su precio; y qué mejor forma de que pasara los distintos controles policiales y fronterizos que aprovechar su condición de ucranianos y camuflarla en transportes de ayuda humanitaria destinada a su país.

TE PUEDE INTERESAR

Unos 21.200 ciudadanos ucranianos se empadronaron en España solo en marzo

Laura Morales

“Los vehículos se llenaban de cajas que iban llenas de ropa, alimentos y otra serie de objetos y productos con los que auxiliar al pueblo ucranio, pero en una o varias de ellas se escondía la marihuana”, señalaron las citadas fuentes, que precisaron que añadieron que las furgonetas que simulaban formar parte de una caravana solidaria.

La organización rápidamente comenzó a rentabilizar sus actividades delictivas hasta el punto de olvidar un fajo de 10.000 euros en un de doble fondo. Había sido habilitado en la radio de un turismo que fue registrado durante la fase de desarticulación de la banda. Lo inspeccionaron dos agentes sin que llegasen hasta el dinero y fue un tercero el que finalmente pudo introducir su mano y coger los billetes. ¿Por qué creen los investigadores que pudieron dejárselos allí? Pues porque en otro vehículos caleteado en el que escondían 300.000 euros estaba bajo control en un garaje, mientras que ese estaba aparcado en la calle, a la intemperie y al acceso de cualquiera.

La operación que ha permitido desmantelar este entramado se ha desarrollado en dos fases: una primera, que tuvo como objetivo al grupo de refugiados ucraniano; y la segunda, que estuvo enfocada en los suministradores de la marihuana. El Instituto Armado informó de la detención de un total de 30 personas —una decena, refugiados, aunque también capturaron a tres alemanes, españoles y a algún individuo de origen marroquí— y la incautación de decenas de kilos cogollos y 1.500 plantas de cannabis.

La investigación se inció el pasado mes de agosto, cuando los investigadores detectaron en la Costa del Sol la existencia de un grupo de ciudadanos ucranios dedicados a recopilar importantes cantidades de marihuana para posteriormente remitirla a otros países de Europa.

Dos agentes resultaron heridos al ser embestido su coche por uno de los investigados

Esta organización se desplazaba a diferentes puntos de Andalucía donde adquirían la droga ya envasada, y tomando fuertes medidas de seguridad, la transportaban e iban almacenando en un piso situado en la localidad malagueña de Mijas. Las siguientes pesquisas permitieron localizar en el vecino municipio de Fuengirola dos furgonetas matriculadas en Ucrania con un total de 109 kilogramos de marihuana envasada al vacío y camuflados en cajas de cartón. Los cuatro ocupantes de estos vehículos fueron arrestados por un delito de tráfico de drogas.

Durante la primera actuación de los agentes se llevaron a cabo un total de 11 registros domiciliarios que se concentraron en la provincia de Málaga. Gracias a ellos se pudieron localizar 740.400 euros, 25.250 dólares americanos, 20 kilogramos de cogollos y 1.000 plantas de cannabis, además de un arma corta y todo tipo de material policial —chalecos balísticos, dispositivos de seguimiento GPS...—.

Un total de 11 personas fueron arrestadas por delitos de tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal, tenencia ilícita de armas y defraudación de del fluido eléctrico, entre otros cargos.

Debido a la magnitud de la organización, parte de las actuaciones se reservaron para una segunda fase de explotación. En esta ocasión, la Guardia Civil detuvo a 14 proveedores de las sustancias estupefacientes, localizados en las provincias de Granada, Córdoba y Sevilla. En los ocho registros practicados, se intervinieron 1.500 y diez kilogramos de marihuana envasada, cinco armas de fuego y 15.000 euros en efectivo.

TE PUEDE INTERESAR

El fraude del 'criptocannabis' provoca un aluvión de afectados en la Audiencia Nacional

Beatriz Parera Alejandro Requeijo

Durante las detenciones, dos de los investigados trataron de darse a la fuga llegando a embestir un vehículo policial ocupado por dos agentes, los cuáles sufrieron lesiones leves. No obstante, no pudieron escapar y finalmente fueron detenidos. A los delitos por los que eran investigados, además, se les imputaron atentado contra agentes de la autoridad y contra la seguridad vial. Este incidente se produjo en la carretera A-375.

La operación ha sido desarrollada conjuntamente por miembros del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga y OCON Sur, con apoyo del CRAIN, el Grupo de Acción Rápida (GAR) y del resto de comandancias afectadas.