El silencio cubre hoy la entrada del Colegio Mayor Elías Ahúja. Los estudiantes universitarios entran y salen de su residencia sin mediar palabra, apartando la cara y sin detenerse tras la difusión de un vídeo de cánticos misóginos hacia las compañeras del colegio colindante. "No es la primera vez que ocurre esto, ya nos advirtieron algunas veteranas. Siempre se han mantenido calladas, pero todos los años pasa algo del estilo aunque no se haga viral", comentan dos estudiantes que residen en el Colegio Mayor Santa Mónica y que han visto en primera persona como sucedieron los hechos. 

Las dos jóvenes estudiantes no dan crédito a lo sucedido. "Da mucho miedo pensar que con los compañeros que hacemos actividades sean así. Estaba preparado y organizado. Esto no ha sido algo casual y espontáneo, solo hay que ver el vídeo", comentan. Se sienten desconcertadas y admiten que les da miedo hablar ya que no saben hasta dónde pueden llegar las represalias. Bajo el grito de "¡Putas, salid de vuestras madrigueras como conejas, sois unas putas ninfómanas, os prometo que vais a follar todas en la capea! ¡Vamos, Ahúja!", los residentes del Colegio Mayor Elías Ahúja comenzaban los canticos denigrantes hacia las compañeras del colegio femenino.

Otras residentes del colegio Santa Mónica, en cambio, quitan relevancia a la actitud de sus compañeros del colegio masculino. "Esto es algo habitual, no es la primera vez que ocurre y tampoco hay que darle demasiada importancia. Se le está dando una relevancia que muchas de nosotras no vemos", explicaba una de las alumnas en el exterior de la residencia de estudiantes.

"No es un cántico machista ni mucho menos, es algo habitual aquí como te pueden gritar otra cosa", asegura otra de sus compañeras, antes de concluir: "No nos sentimos ofendidas". De hecho, según relatan, entre ambos colegios mayores -el masculino y el femenino- comparten actividades, encuentros y momentos festivos.

Aunque entre las estudiantes más indignadas por lo ocurrido estos futuros momentos de convivencia también son vistos con preocupación: "Si organizan esto así no quiero imaginar lo que harán cuando tomen unas copas de más, quién me dice que no se alíen para algo peor", comenta una de las chicas. Próximamente se iba a celebrar una fiesta en una capea donde se reunirían los estudiantes de ambos colegios mayores. Se contempla por parte del rectorado cancelar esta celebración con el fin de dar un "castigo ejemplar". 

Los colegios mayores y la universidad condenan los hechos

Desde los colegios y la Universidad Complutense condenan esta actuación y aseguran que habrá consecuencias para quienes participaron en los cánticos. "Quiero mostrar mi absoluto rechazo y el de toda la comunidad universitaria complutense por los hechos que han ocurrido. Todas las universidades están siendo conscientes de la necesidad de actuar coordinadamente", explica Rosa de la Fuente, vicerrectora de estudiantes de la Universidad Complutense. No solo pretenden amonestar a quienes protagonizaron los bochornosos cánticos, también pretenden reconstruir la convivencia entre los estudiantes y reflexionar sobre lo sucedido. 

En la puerta del Colegio Mayor Elías Ahúja esperaban dos colegiales dispuestos a hablar por sus compañeros. Juan Melo y Pascual Antillach, dos estudiantes de tercer curso que no participaron en lo ocurrido, comentan estar "avergonzados" por lo sucedido y aseguran que no les había llegado la información de lo que planeaban ejecutar sus compañeros la noche del domingo. A lo largo de la mañana, el movimiento de estudiantes no parecía cesar, pero ninguno de ellos se prestaba a hacer ningún tipo de declaración. 

Instantes más tarde, dos defensoras del movimiento feminista se personaron en la entrada del colegio mayor. Mostraban dos pancartas bajo los lemas "Nosotras nos organizamos para pedir igualdad de derechos, vosotros para llamarnos putas y ninfómanas" y "Empieza con un grito machista, termina en violación",  con el fin de mostrar su rechazo hacia lo ocurrido. "Ver el vídeo en redes sociales nos ha afectado tanto que nos ha hecho salir de casa, venir aquí y hacer estos carteles para decir lo que pensamos. Aunque no seamos alumnas somos mujeres. No estamos de acuerdo y esto no se puede seguir permitiendo. Nos van a escuchar y les vamos a decir a la cara lo que son, machistas", reivindica Mara Mariño, feminista y periodista. 

En el Colegio Mayor Santa Mónica las estudiantes no quieren hacer comentarios al respecto, muchas de ellas quieren hacer como si no hubiera pasado nada y restarle importancia a los hechos. "Me da mucha impotencia porque algunas compañeras no quieran mojarse. Creen que es algo que tenemos que aguantar, que es una broma. ¿Qué tipo de broma es? No lo entiendo y a mí no me hace ninguna gracia. ¿Hasta cuando vamos a tener que soportar esto?", relata una de las estudiantes del centro.