Por ser mujer no debería necesitar más protección que un hombre, no merezco vivir asustada.
Es necesario seguir luchando contra la violencia que sufren muchísimas mujeres de mano de sus maltratadores, ¡por supuesto!, y también se debe proteger al hombre maltratado, una realidad que se tiende a obviar, con esto no se trata de justificar en ningún momento el maltrato al que son sometidas muchas mujeres por sus parejas, ni minimizar los daños y el peligro al que están expuestas, sexual y físicamente, ¡hablo de igualdad de derechos!
El hombre y la mujer somos iguales ante la ley, por lo tanto tenemos los mismos derechos y deberes
Pero… yo no quiero ser igual que un hombre para considerarme feminista, mi feminidad lo considero un atributo y me hace sentir segura.
La Educación que les demos a nuestros hijos e hijas es la base para conseguir la igualdad. Debemos inculcarles que no es cuestión de quien va el primero, sino de ir juntos, uno al lado del otro ¡Eso es igualdad! ¡Eso es respeto!
Ningún ser humano es dueño ni tampoco propiedad de nadie.
Con el ejemplo debemos mostrarle que el amor no es posesión ni control, sino al contrario, es entrega, libertad, respeto, igualdad.
Hay muchos hombres que no se sienten identificados con el modelo estereotipado de la hombría (machismo), y rompiendo con el modelo tradicional de la masculinidad, están construyendo nuevos valores positivos, más libres, igualitarios, solidarios y respetuosos.
El feminismo debe ser solidario, defender la igualdad entre el hombre y la mujer en la sociedad, luchar por conseguir los mismos derechos económicos, sociales y culturales, buscando el beneficio por igual para ambos.
Yo me considero femenina que no débil, también feminista que no anti-hombres, a veces princesa que no frágil…y ante todo ¡Soy un ser humano! Y como tal debo ser respetado.
Victoria C.P
EL RINCÓN DE VICTORIA 