Brexit

Boris Johnson abusó de sus poderes al suspender el Parlamento, según el dictamen del Tribunal Supremo

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Los jueces dicen que la suspensión tiene "un efecto extremo sobre los fundamentos de la democracia". John Bercow anuncia que el Parlamento reanudará mañana sus sesiones.

El Supremo declara ilegal la suspensión del Parlamento británico de Boris Johnson EL MUNDO (Vídeo)

El Tribunal Supremo ha dictaminado que la suspensión del Parlamento británico es "ilegal" y que Boris Johnson abusó de sus poderes al ordenar la "prórroga" de las sesiones de Westminster durante cinco semanas. Pese al revés judicial, el "premier" ha indicado que no descarta volver a cancelar el Parlamento hasta el tradicional discurso de la Reina, previsto para el 14 de octubre.

La jueza Brenda Hale leyó el dictamen, alcanzado por unanimidad de los 11 magistrados del Supremo, estipulando que la decisión del primer ministro de aconsejar a la Reina la suspensión del Parlamento fue "ilegal" y asegurando que ha tenido "un efecto extremo sobre los fundamentos de la democracia". Hale advirtió que las sesiones en Westminster deberán reanudarse "lo antes posible".

El alto tribunal estipuló que la suspensión es "ilegal" por considerar que su efecto ha sido "frustrar o prevenir la habilidad del Parlamento para ejercer sus funciones constitucionales sin una justificación razonable"

Sin necesidad de mencionar el Brexit, la presidenta del Tribunal Supremo, Lady Hale, recalcó las circunstancias históricas en las que se produjo el cierre del Parlamento y aseguró que la decisión quedaba "vacía y sin efecto".

La reacción del 'premier'

La noticia sorprendió a Johnson en Nueva York, durante la cumbre de Nacional Unidas sobre el cambio climático y la apertura de la Asamblea General de la ONU. Boris Johnson expresó su "desacuerdo" con la decisión del Supremo y advirtió que la reapertura del Parlamento el miércoles hará "más difícil la negociación del Brexit".

"El Parlamento lleva tres años debatiendo el Brexit y ha llegado el momento de llegar a un acuerdo y salir de la UE el 31 de octubre, y es lo que vamos a hacer", dijo Johnson. "Hay mucha gente que básicamente quiere parar la salida de la UE", especificó el "premier". "Lo que tenemos ahora es un Parlamento que no puede ser suspendido y que no quiere elecciones... Es la hora de hacer que las cosas avancen"

El presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, que ya había anunciado de antemano su intención de volver a convocar las sesiones del Parlamento si el alto tribunal fallaba contra el Gobierno, anunció que ha dado las instrucciones necesarias para que los diputados reanunden mañana su actividad a las 11.30 hora local (12.30 horas en España).

Bercow expresó su satisfacción por la decisión del Supremo, considerando como "ilegal" el cierre de Westminster, y defendió "el derecho y el deber" del Parlamento de mantener el control sobre el Ejecutivo y el primer ministro.

El líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, se sumó a las voces reclamando la dimisión de Boris Johnson por "desacato al Parlamento". "Pido al primer ministro que reconsidere su posición", dijo Corbyn en la conferencia del Partido Laborista en Brighton. "Puede acabar siendo el "premier" que menos tiempo ha estado en el poder".

El dictamen de los 11 jueces del Supremo amenaza con desencadenar una crisis constitucional sin precedentes entre el Gobierno y el Parlamento, y pone además en tela de juicio el papel del propio Johnson al pedir la autorización expresa de la reina Isabel II para la suspensión temporal de Westminster.

Durante las sesiones en el Supremo, el ex primer ministro John Major acusó al líder conservador de "abuso de poder" y de haber ordenado el cierre del Parlamento -tras seis derrotas consecutivas- con fines claramente políticos para evitar trabas a sus planes del Brexit. El abogado escocés Adian ONeill llegó a acusar a Johnson de ser "el padre de las mentiras contra la madre de los Parlamentos".

A su paso por Nueva York, Johnson negó que el revés judicial pueda hace insostenible su posición y que pueda incluso forzar su dimisión. "Las razones para tener un Discurso de la Reina y presentar mi programa de Gobierno son extremadamente buenas", dijo.

El panel de 11 jueces tuvo que pronunciarse simultáneamente en el proceso de apelación de dos fallos judiciales: uno en Inglaterra y Gales (a favor del Gobierno) y otro en Escocia (que calificó de "ilegal" la decisión de Johnson). Los procesos se iniciaron inmediatamente después de la suspensión de las sesiones parlamentarias en la madrugada del 9 al 10 de septiembre, en medio de escenas de caos y protestas de los diputados de la oposición laborista, que exhibieron carteles donde podía leerse: "Silenciados".

La "prórroga parlamentaria" es un procedimiento que se ha utilizado ocasionalmente a lo largo del último siglo para forzar un nuevo período de sesiones. Habitualmente, durante la celebración de las conferencias anuales de los partidos políticos en septiembre, el Parlamento funciona a medio gas o suspende temporalmente sus sesiones.

La suspensión excesivamente larga de cinco semanas, en la recta final del Brexit previsto para el 31 de octubre, provocó una lluvia de acusaciones contra el líder conservador. "Boris Johnson se comporta como uno de esos dictadores socialistas que dice odiar", declaró la líder liberal-demócrata Jo Swinson. Sus detractores compararon la decisión del "premier" conservador con la de Carlos I, que suspendió el Parlamento en 1628 y acabó ordenando el encarcelamiento de los parlamentarios para poder reinar directamente y sin interferencias durante 11 años, en la antesala de la guerra civil inglesa.

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