Una distopía es una sociedad indeseable que puede existir tanto en el futuro cronológico de la humanidad como en el de un universo totalmente ficticio, esto de acuerdo a la creatividad del autor que decida decantarse por esta temática a la hora de escribir una novela. La palabra “distopía” está incluida dentro del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española como la “representación ficticia de una sociedad futura de características negativas causantes de la alienación humana”, lo que lleva al subgénero de la Ciencia Ficción Distópica, donde se explota la temática de un régimen autoritario futurista que colma de dolor la vida de sus ciudadanos cuya sociedad pudiera parecer “ordenada”, pues una distopía implica un orden civilizado, estructurado y establecido de la forma más rígida posible sin ningún desorden postapocalíptico como el que se ve en películas estilo Mad Max.
Con esto en mente se piensa de inmediato en sagas juveniles como Los Juegos del Hambre, criticadas por el simple hecho de no poseer la misma profundidad que los clásicos del género; sin embargo, éstas son para un público distinto, por algún lado se tiene que empezar si el “ojo” no está “acostumbrado” a digerir la densidad de las obras dedicadas a un lector más avanzado, si este no es tu caso, sigue leyendo porque a continuación encontrarás una lista de novelas distópicas que deberías leer.
París en el Siglo XX
Escrita por Julio Verne en 1863, esta novela se desarrolla en 1960, año en el que la sociedad abandonó por completo el respeto por las artes y las humanidades para dedicarse casi exclusivamente a las ciencias exactas como la ingeniería, la economía, las matemáticas, las ciencias naturales… entre otras áreas del conocimiento que sólo se dedican al saber tecnológico. En este contexto, un graduando en Literatura llamado Michel Jérôme Dufrénoy, es honrado con un premio por sus logros académicos, lo que provoca el abucheo de sus compañeros galardonados en disciplinas más pragmáticas como las anteriormente mencionadas, la mayor desgracia de este libro es que al parecer se volvió realidad.
Paris en el Siglo XX es considerada como la “novela perdida” de Julio Verne debido a que no se publicó en su momento por los problemas que Verne tuvo con su editor, el libro tuvo que esperar hasta 1994, año en el que se publicó por primera vez en francés.
El Hombre en el Castillo
Esta obra pertenece al subgénero de la Ciencia Ficción Distópica pero se trata de una ucronía, que es una línea de tiempo paralela surgida en un punto de la historia en el que los acontecimientos no sucedieron como debían ocurrir de acuerdo a la vida real, en este caso fue la victoria de la Alemania Nazi y las demás potencias del Eje en la Segunda Guerra Mundial, por lo que el mundo se halla divido en tres áreas distintas: el territorio de Alemania, el de Japón y la Zona Neutral; en esta última conviven bajo condiciones de vida deplorables todas las personas rechazadas de otros sitios por cuestiones raciales, genéticas y/o religiosas. Dentro de esta realidad alternativa se narra la vida de varios personajes que viven sus rutinas diarias bajo este nuevo orden mundial hasta que se topan con la Resistencia y el libro La Langosta se ha Posado, en cuya trama se cuenta la vida en un mundo donde los Aliados ganaron la guerra, dicho libro fue escrito por un tal “hombre en el castillo”.
La novela, cuyo título en inglés es The Man in the High Castle, fue escrita por Philip K. Dick y publicada en 1962, esta obra le valió al autor el premio Hugo a la mejor novela en 1963 así como la fama de ser la novela “madre” de las ucronías, actualmente cuenta con una serie de televisión homónima producida y transmitida por Amazon en Amazon Prime Video.
Mercaderes del Espacio
Frederik Pohl y Cyril M. Kornbluth fueron los autores de esta novela publicada en números para la revista Galaxy Science Fiction antes de que se emitiera una edición en formato libro en 1953. La obra trata sobre una sociedad futurista dominada por las grandes corporaciones que mantienen a la mayoría de la población sometida a jornadas esclavizantes de trabajo para sostener un obligado estilo de vida hiperconsumista colmado de la amoralidad de los valores del momento mientras que los Señores del Comercio controlan las vidas de todos los habitantes del mundo; sin embargo, un exitoso y adinerado publicista llamado Mittchell Courtenay, perteneciente a la élite del planeta, cree que todos son tan felices como él hasta que choca con la cruda realidad.
La Máquina Diferencial
Esta obra publicada en 1990 fue escrita por William Gibson y Bruce Sterling en el marco de las ucronías pero con una temática perteneciente de igual forma al Steampunk, debido a que esta novela se desarrolla en la época victoriana cuando el Partido Industrial Radical obtiene el poder y un matemático logra construir un artefacto de cómputo llamado la Máquina Diferencial, todo esto gracias a la industrialización a vapor que goza Inglaterra. El dispositivo asume un rol homólogo al de las computadoras del siglo XX, lo que provoca el ascenso de Gran Bretaña como la primera potencia mundial cuyo poder logra evitar que la Unión gane la Guerra Civil estadounidense, en este orden surgen los Estados Confederados, además de otros con gobiernos comunistas o de corte colonial bajo el poder británico o ruso. La trama gira alrededor de tres personajes que buscan unas tarjetas perforadas que sólo pueden ser leídas por una máquina diferencial, el resultado de esto sería la obtención de enormes ventajas por parte del dueño.
Fahrenheit 451
El título del libro hace referencia a la temperatura en grados Fahrenheit que necesita el papel para arder, esto se debe a que la trama se desarrolla en un futuro en el que un gobierno totalitario tiene como dogma el odio a los libros, pues los considera “nocivos” para el intelecto del ciudadano ya que lo induce al pensamiento subversivo y a otras creencias distintas a la “verdadera” que impiden la “felicidad” y la productividad. El Estado se vale de un cuerpo de bomberos equipados con lanzallamas para destruir cualquier libro en existencia, acciones que motivaron a un grupo de disidentes a memorizar libros para transmitirlos de forma oral, a estos individuos se les conoce como “libros humanos”. El protagonista es un bombero llamado Guy Montag que respeta el orden establecido hasta que se topa con su vecina Clarisse McClellan.
La novela fue escrita por Ray Bradbury y publicada en 1953, cuenta con una adaptación cinematográfica homónima dirigida por François Truffaut, la cual fue estrenada en 1966.
Un Mundo Feliz
Desde lejos cuesta poner a Un Mundo Feliz dentro del subgénero de la Ciencia Ficción Distópica, pues la vida en el Estado Mundial que relata el autor Aldous Huxley parece muy agradable y perfecta salvo por el detalle de que todos los seres humanos nacen predestinados en una cadena de ensamblaje que reemplazó a la familia como núcleo social, los humanos son creados con ingeniería genética para manipular su apariencia y capacidades con el objetivo de encasillarlos en una de las siguientes castas: Alfa, Beta, Gamma, Delta y Epsilon; en este orden se encuentran clasificados los grupos de personas, desde las mejores física e intelectualmente hablando (los alfas) hasta las peores en estos aspectos (los epsilones). El planeta funciona como un solo país a excepción de unas reservas en las que habitan los “salvajes”, la vida en el mundo civilizado carece de cualquier tipo de dolor por lo que las personas son sometidas con el placer, lo que las hace ignorantes de su dominación, las actividades individualistas y el libre albedrío están prohibidos pero no hace falta la represión, debido a que todos fueron condicionados desde niños a amar sus vidas asignadas con métodos como la hipnopedia y el reflejo condicional.
En esta sociedad que alaba a Henry Ford como a su Dios, surge la figura de Bernard Marx, un hombre alfa que se empieza a sentir inconforme pero sufre un cambio en su vida gracias al encuentro con un salvaje. En este libro publicado en 1932, Aldous Huxley hace múltiples críticas a la sociedad de su momento, siendo la infantilización de los adultos una tendencia con nefastas consecuencias en su novela.
Un Mundo Feliz cuenta con dos adaptaciones en formato de películas para la televisión, una en 1980 y otra en 1998, además de ello, su título en inglés: Brave New World, es homónimo al duodécimo álbum de la banda de Heavy Metal: Iron Maiden, cuya portada fue inspirada en la novela así como una de las canciones que cuenta con el mismo nombre.
1984
1984 es la bandera de las obras pertenecientes a la Ciencia Ficción Distópica, pues gracias a esta novela escrita por George Orwell nacieron las expresiones como “orwelliano” o “Gran Hermano” para referirse a los regímenes totalitarios y sus dictadores, cuyas características fueron expuestas y detalladas por Orwell en este libro.
La trama gira alrededor de Winston Smith, un funcionario del Ministerio de la Verdad encargado de censurar artículos de periódico que contradicen a la versión de turno que tenga el gobierno sobre la historia, en esta realidad, el mundo cuenta con tres superpotencias guiadas por ideologías similares que se encuentran inmersas en una guerra sin fin: Oceanía (donde vive Winston), Eurasia y Asia Oriental; cada una de éstas cambia de aliado constantemente en lo que corresponde a un esfuerzo bélico para mantener a la población sumida en la escasez. Los ciudadanos de Oceanía se encuentran estratificados en tres clases sociales: el Partido Interno (los más privilegiados), el Partido Externo (la clase media) y los proles (la clase baja), las dos primeras se vigilan constantemente entre sí al servicio de un dictador conocido como el Gran Hermano a quien nadie ha visto en público mientras que los proles viven en la más completa ignorancia. Los miembros del partido deben ser muy cuidadosos con lo que dicen o hacen, pues en todas las casas hay “telepantallas” que los observan en todo momento, Winston soporta esas represiones a diario hasta que comienza a tornarse inconforme, luego conoce a Julia, una joven que se enamora de él y lo lleva a cometer actos de disidencia.
1984 fue publicada en 1949 y al principio iba a llamarse The Last Man in Europe “El Último Hombre en Europa”, cuenta con dos adaptaciones al cine, una en 1956 y otra en 1984, ésta última fue protagonizada por John Hurt y dirigida por Michael Radford, además, tiene la peculiaridad de haber sido rodada en Londres en el periodo de abril a junio de 1984, mismo lugar y tiempo en los que está ambientada la novela.
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