#8 Estamos de acuerdo (creo, es que te había leído de una manera pero ahora te releo y lo entiendo de otra forma).
Hicieron un documental en Documentos TV (La 2 de TVE) sobre la resistencia a los antibióticos (otra pandemia que se nos viene encima). Se vio un experimento que hicieron con una bacteria, no recuerdo cual. El caso es que pusieron en unas placas de petri interconectadas distintas concentraciones de un antibiótico: 1, 10, 100, 1000. La solución tenía algo de azúcar o comida que permitría a las bacterias alimentarse. Pusieron bacterias en la plaquita con el antibiótico disuelto al 1. Comenzaron poco a poco desde un rinconcito a invadir la placa, se veía a simple vista porque iban dejando un rastro. Cuando llegaron a contactar con la otra plaquita, por un agujerito, se veía que les costaba entrar. Al cabo de unas horas ya estaban en la segunda placa. Al cabo del tiempo colonizaron la placa con el valor más alto de antibiótico. Y dijeron que no podían seguir con el experimento porque era tal la cantidad que habían puesto ahí que de poner más ya no era soluble en agua. En suma, las bacterias fueron mutando hasta que el antibiótico no pudo pararlas (en ninguna concentración). Pues este mismo fenómeno se da con los virus y las vacunas no esterilizantes.
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Hicieron un documental en Documentos TV (La 2 de TVE) sobre la resistencia a los antibióticos (otra pandemia que se nos viene encima). Se vio un experimento que hicieron con una bacteria, no recuerdo cual. El caso es que pusieron en unas placas de petri interconectadas distintas concentraciones de un antibiótico: 1, 10, 100, 1000. La solución tenía algo de azúcar o comida que permitría a las bacterias alimentarse. Pusieron bacterias en la plaquita con el antibiótico disuelto al 1. Comenzaron poco a poco desde un rinconcito a invadir la placa, se veía a simple vista porque iban dejando un rastro. Cuando llegaron a contactar con la otra plaquita, por un agujerito, se veía que les costaba entrar. Al cabo de unas horas ya estaban en la segunda placa. Al cabo del tiempo colonizaron la placa con el valor más alto de antibiótico. Y dijeron que no podían seguir con el experimento porque era tal la cantidad que habían puesto ahí que de poner más ya no era soluble en agua. En suma, las bacterias fueron mutando hasta que el antibiótico no pudo pararlas (en ninguna concentración). Pues este mismo fenómeno se da con los virus y las vacunas no esterilizantes.